Giacomo Agostini accumula el récord de victorias, un logro que hasta entonces había estado en peligro pero que con la retirada de Valentino Rossi se mantiene intacto algunos años más.
Giacomo Agostini seguirá siendo durante un tiempo el hombre de todos los récords en la historia del Gran Premio de motociclismo. En particular, mantiene cerca de él al que más le importa y lo que concierne a sus logros, cuya puntuación es de 122. En efecto, el que lo amenazó ya está retirado y es, por supuesto, Valentino Rossi. estaba estancado en 115 desde Assen 2017. Para Ago, es un alivio.
Giacomo Agostini está jubilado desde 1977 y ha cumplido 79 años. Pero siempre tiene buen pie y sigue de cerca las estadísticas de cada temporada. Y por una buena razón: es él quien los lidera tras una prolífica carrera que le ha llevado notablemente a posicionarse como el piloto con mayor número de victorias de toda la historia. Para vencerlo, hay que hacerlo mejor que 122 éxitos. Y a Il Dottore solo le faltaron ocho para suplantarlo definitivamente.
Un récord imbatible
Pasó cerca, pero desde 2017, el peligro ya no era realmente relevante. Aún así, con esta retirada de Vale, no hay nada de qué preocuparse por un tiempo, ya que quien se hizo cargo de la persecución es un Marc Márquez con 85 logros. Y tiene, de momento, otras preocupaciones que gestionar. Sobre esta situación que conserva su supremacía, Agostini comentó en Motorsport-total: “Admito que estoy feliz de que Valentino se haya ido sin haber batido antes mis récords“. Sin embargo, añade: “pero incluso sin haber batido mis récords, seguirá siendo el campeón absoluto“.
La carrera deportiva de Agostini terminó en 1977. El italiano puede entender cómo se sintió Rossi después de su última carrera de MotoGP: “Entiendo a Vale, yo tenía la misma sensación. Dejar tu gran amor no es fácil para nadie, pero tienes que entender que este momento se acerca y tienes que estar dispuesto a aceptarlo”, explica la leyenda de 79 años. “Dio tanto y también recibió tanta alegría, fama, fortuna y dinero. Es difícil, yo también sufrí y lloré durante tres días. A todo el mundo le pasa, hay que ser valiente”, dice Agostini. Termina: “Tarde o temprano, alguien vendrá y me quitará estos registros. Los récords están para romperlos. Pero no me importa conservarlos por un tiempo”.
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