Pol Espargaró, en su marcha de KTM, ha querido agradecer a los austriacos todo el aprendizaje acumulado en los cuatro años juntos y que le ayudará a enfrentarse a su nueva etapa con Honda.
La relación entre Pol Espargaró y KTM llegó a su fin en el pasado Gran Premio de Portugal con la última carrera de la temporada 2020. Una trayectoria cargada de sacrificio y trabajo que pone fin a una de las relaciones más fructíferas de los últimos años en la parrilla de MotoGP. El catalán pone rumbo a una nueva aventura de la mano del Repsol Honda donde compartirá box con Marc Márquez.
Una mochila cargada de aprendizaje
Sin embargo, este camino le comienza con el recuerdo de todo lo vivido en KTM, el aprendizaje y el crecimiento que el proyecto de la escudería austriaca le ha proporcionado. Sin duda, el pequeño de los Espargaró se siente un piloto nuevo en esta aventura y eso, en parte, es gracias a su etapa como piloto de KTM. “Ahora puedo perder y no me siento como un perdedor. No sé cómo explicarlo, porque siento que en KTM he pasado de ser un niño a un hombre en MotoGP“, explicaba el de Granollers a los micrófonos de ‘Motorsport.com’.
Además, ‘Polyccio’ esta seguro de que Honda se fijase en él como el piloto perfecto para compartir box con Marc Márquez las próximas temporadas. “KTM es parte de esto al 100%“, dijo Espargaró cuando se le preguntó si su fichaje por Honda habría sido posible sin su etapa en KTM.
Herramientas para enfrentarse a su nueva etapa
“He descubierto muchas herramientas para usar en la moto que, si hubiera pasado de mi primera moto en MotoGP a HRC, por ejemplo, para mí sería imposible adaptarme porque muchas herramientas que estoy usando ahora las he descubierto en KTM y ellos las estaban desarrollando, yo estaba construyendo con ellos esta moto y conozco cada una de las piezas importantes de la moto, cómo tocarla y cómo hay que configurar la electrónica“.
Espargaró abandona a la escudería que le ha acompañado los últimos cuatro años, y lo hace como un piloto nuevo. “Me enseñaron a ser piloto, de hecho. No era un piloto [antes]. Era un hombre que conducía una moto, pero no era un verdadero piloto de MotoGP. Me enseñaron cómo hacerlo y sin ese aprendizaje, para mí sería imposible enfrentarme al mejor piloto del mundo. Ahora me siento como un hombre. Es muy, muy diferente“.
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