Esta Kawasaki de 400cc es deportiva, divertida y sobre todo fácil de conducir.
La Kawasaki Ninja 400 2019 se sitúa dentro del segmento de motos deportivas A2, donde lo que debe primar son dos cosas; una fácil conducción y que es ideal para el aprendizaje. Esta “pequeña” Kawasaki es una de las motos a tener muy en cuenta si tu perfil está dentro de estas características. Un diseño Ninja con potencia y acabados de calidad la sitúan como una opción muy a tener en cuenta.
La Ninja 400 equipa con un nuevo propulsor bicilíndrico en línea con culata DOHC con cuatro válvulas por cilindro, refrigeración por líquido y alimentado por inyección electrónica que entrega una potencia máxima de 45 CV a 10,000 rpm y un par motor de 38 Nm a 8,000 rpm, nada más y nada menos que 11 CV más que su antecesora.
La Kawasaki Ninja 400 dispone de un chasis multitubular que sigue el diseño de su hermana mayor, la Kawasaki Ninja H2, y que utiliza el motor como pieza de unión. Con una distancia entre ejes de 1,405 mm nos ofrece una moto ágil y de rápidos cambios de dirección, como indica su verdadero carácter deportivo.
A nivel de suspensiones monta una horquilla delantera con barras de 41 mm de diámetro con un recorrido de 120 mm. De la suspensión trasera se ocupa un amortiguador con carga de gas de tipo Uni-Trak con precarga ajustable y un recorrido de 132 mm.
Kawasaki ha equipado en la Ninja 400 un conjunto de frenos bastante óptimo para este tipo de modelos. Delante monta un disco lobulado semiflotante de 310 mm con pinza de pistón doble. Detrás monta un disco lobulado de 220 mm de diámetro con pinza de dos pistones.
Prestaciones claramente mejoradas
Como no podía ser de otra manera, llega equipada de serie con ABS y Kawasaki ha utilizado la última versión desarrollada por Nissin, que se caracteriza por su reducido tamaño y peso.
A nivel de ergonomía, la Ninja 400 destaca por una posición de conducción erguida, con las estriberas más adelantadas y una altura del asiento a tan solo 785 mm. Una moto deportiva apta para usuarios de cualquier estatura. El diseño del carenado favorece la protección aerodinámica y los ingenieros recalcan en el carenado los alerones inspirados en la Ninja H2, así como el diseño del colín. Además, la fábrica de Akashi ha optado por incluir un doble faro frontal equipado con sistema de iluminación led.
El fabricante japonés ha trabajado a conciencia para reducir el peso de esta moto al máximo con un nuevo diseño más eficiente y libre de elementos innecesarios. A esto le sumamos un embrague antirebote que nos facilita la conducción y aumenta la seguridad. No nos olvidemos que la marca, con este modelo, se marcó como objetivo disponer de una buena base para competir en la nueva categoría World Supersport 300 del campeonato del mundo de SBK donde, por cierto, no se le está dando nada mal a nuestra piloto Ana Carrasco al manillar de su Ninja 400.
Esta unidad de pruebas, cedida por Kawasaki España, nos llega calzada con neumáticos Dunlop Sportmax GPR 30 de 110/70R17 delante y 150/60R17 con llantas de 17 pulgadas de corte deportivo que durante la prueba se mostraron muy adecuados para el uso de esta moto.
Más Ninja
Ya a los mandos de la Ninja 400, lo primero que comentar es que es una gozada, es una moto que al primer golpe de gas te lo pone todo fácil, es ágil y rápida, lejos muy lejos de muchas del segmento A2.
Como una Ninja, acelera de forma contundente desde punto muerto, con unos bajos consistentes, bien compensada en medios y con mucha vida en la parte alta del cuenta revoluciones, y si eres de los que apura la zona roja, os sorprenderá con una velocidad punta capaz de quitarte una buena cantidad de puntos del carnet.
Como decía, es una moto muy estable y con la dirección muy precisa, su paso por curva es impecable y las suspensiones, con un comportamiento equiparable al de sus hermanas mayores, transmiten bien el agarre de las ruedas, permitiendo tener buena sensación de control y capacidad de tumbar.
Es una pequeña deportiva cómoda, sin que por ello se vean limitados los movimientos encima del asiento si eres de los que disfrutas de una conducción más deportiva. Si por el contrario, eres más de salidas de fin de semana, te encuentras ante una moto noble, que destaca por su manejo y facilidad de conducción.
Con una generosa potencia de frenado del conjunto delantero es más que suficiente para detenerla. Además, podremos estar muy tranquilos pues el ABS de Nissin, que demostró ser muy poco intrusivo.
Tras la cúpula se aloja un completo cuadro de instrumentos, exactamente el mismo que emplea la Ninja 650, con toda la información que podemos necesitar, indicador de marcha engranada y un ordenador de abordo con consumos, parciales, etc…
Con un peso en orden de marcha de 168 kg, y dispone de una capacidad en el depósito de combustible para 14 litros. Sorprendente el consumo durante los días de prueba, no ha sido muy elevado incluso hemos llegado a rozar los 300 kms de autonomía.
En resumen, una amplia gama de pilotos podrán disfrutar de una conducción fácil y excitante, subir un poco la dosis de adrenalina (de forma controlada) con esta Ninja 400.
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