El piloto brasileño se ha proclamado campeón del mundo de Moto2 en el último Gran Premio de la temporada, en Cheste.
Diogo Moreira es el nuevo campeón del mundo de Moto2, convirtiéndose en el primer piloto de la historia de su país en hacerlo. El brasileño terminó undécimo la carrera, con una posición que le bastaba para llevarse el título a su casa, superando, así, a su competidor Manu González. Un campeonato muy importante para él, que lo agradece todo a su familia y amigos, por su camino a vivir a España para luchar por sus sueños, tal como nos traslada Nerea García desde Cheste las palabras del piloto.
El primer Campeón de Brasil: «Me he quitado mil toneladas de mi espalda»
La felicidad, en un momento como este en el Gran Premio de Valencia, lo es todo para el brasileño. «Muy contento y muy tranquilo. Me he quitado mil toneladas de mi espalda. Al final, no había presión, pero quería ganarlo. Y sobre todo lo tenía en mi mente y lo hemos conseguido». Un hito que hubiera firmado a mitad de campeonato, si alguien se lo hubiera dicho. «Lo hubiera firmado ya, lo hubiera firmado desde el principio de año seguro. Porque al final hemos trabajado mucho para esto y la verdad que después de tanto trabajo lo hemos conseguido«.
Un título, además, que va más allá de su mérito personal y que orgullece todo un Brasil, siendo el primero en lograr un Mundial de Moto2. Y bromeando con la celebración futbolística, no faltaba la comparación con Pelé. «Falta mucho para que sea el Pelé de las motos. Hemos ganado un campeonato y creo que cuatro carreras, si no me equivoco, en Moto2. Pero, bueno, lo hemos hecho. Es bueno tener un campeón del mundo brasileño, entonces yo creo que la gente estará muy contenta, seguro, y solo tengo que agradecer a todo el mundo».
Agradecido a su gente, con un Diogo que vino muy joven a España
Diogo Moreira tuvo que venirse a España, dejándolo todo de lado, y que hoy ha tenido su recompensa. «Al final es difícil. Porque me vine muy joven a España, con 12 años, yo y mi padre solo, al final lo hemos dejado pues todo de lado, ¿no? Mi familia, el trabajo de mi padre también… Entonces solo tengo que agradecer a todo el mundo que ha estado conmigo y sobre todo a mi familia que pues ha dedicado su vida para mí«.
Y para celebrarlo, ahí tenía, también, a su gente (que no se lo esperaba). «No, la verdad que no me lo esperaba, sabía que había algo montado, pero bueno, vi a mi hermano ahí y sobre todo no me lo esperaba y la gente, los futbolistas, muy malos, por cierto, porque ninguno de ahí juega a fútbol. Pero nada, son todos mis amigos y muy contento por esto«.
Compartiendo círculo de campeones con Marc Márquez y Rueda
Campeón de Moto2, mientras que Marc Márquez lo ha hecho en MotoGP y, Rueda, en Moto3. «Muy contento. Rueda y Marc hicieron un año muy bueno y me alegro mucho por ellos. Al final son dos personas con las que entreno y hablo mucho. Sobre todo vi a Marc ahora, cuando lo vi me he emocionado. Y con Rueda esta mañana también he hablado con él y la verdad que muy contento por ellos y seguro que ellos por mí».
El piloto de Cervera, además, pese a no poder estar mucho rato juntos, le da consejos al joven de Brasil. «Este año ha sido difícil estar juntos porque al final no paramos en casa. Entonces es difícil estar juntos, pero sí, Marc siempre me da consejos y agradecido por ello«. Un compañero que, el año que viene, estará en la misma parrilla que él, aunque ahora toca pensar en el presente. «Sí, sobre todo tenemos que disfrutar el momento de ahora, estar con el equipo y disfrutar de la cena de hoy con ellos y ya mañana pensaremos en MotoGP, pero de momento tenemos que disfrutar el momento».
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