Bezzecchi triunfa en el caos y Martín naufraga

Foto: motogp.com

El joven piloto italiano logra la primera victoria de su vida en una carrera en condiciones mixtas. Canet acaba segundo, con Di Giannantonio en el podio, mientras que Martín, que arriesgó, apenas fue undécimo.

Atípica carrera de Moto3 en Termas de Río Hondo. Como ya sucedió en este trazado en 2016, la climatología jugó un papel decisivo en la disparidad de estrategias. Con el suelo ciertamente húmedo, casi todos los pilotos optaron por salir con gomas de agua, y de ellos, el mejor fue Marco Bezzecchi. El italiano, de 19 años, consigue su primera victoria mundialista en unas condiciones, las de mojado, en las que ya logró su único podio, en Motegi’2017.

Bezzecchi salió como un tiro desde que se apagó el semáforo, con la convicción de que, siendo un outsider de la categoría, no tenía nada que perder. Y así fue, arriesgando como Pawi -ganador de aquella carrera en 2016- y sin mirar atrás en ningún momento. Consiguió una ventaja superior a los cinco segundos en muy pocas vueltas y, una vez allí, gestionó la situación como un veterano.

El poco drenaje del trazado jugó a favor de Bezzecchi, que seguro que temía, desde la tensión que genera una carrera, una caída de los neumáticos en las últimas vueltas. Era lo lógico, pero la pista no se secó lo suficiente y las gomas de agua aguantaron, pese a la formación del famoso ‘carril’, al que se aferraban los valientes que apostaron por el neumático de seco.

En segunda posición entró Arón Canet, que realizó una carrera muy seria que le catapulta directamente al liderato del Mundial. El valenciano fue de menos a más, esperando que sus rivales se viniesen abajo, hasta que tomó el mando del grupo perseguidor de Bezzecchi en el último tercio de la prueba. Canet acabó muy fuerte la carrera, pero la ventaja que tenía el líder le hizo imposible una remontada. No obstante, el resultado es muy bueno para el Mundial.

El podio lo completó otro de los favoritos a luchar por la corona, el italiano Fabio Di Giannantonio. Fue el único que aguantó el tirón de Canet en el tramo final para discutirle la segunda posición en los últimos giros. Algo detrás entró en meta Bastianini, que también cumplió y recogió unos buenos puntos que le hacen olvidar, al menos parcialmente, el fiasco de su caída en Losail.

Martín se equivoca en la estrategia

Si la cara fue la felicidad de Bezzecchi y la satisfacción de Canet, la cruz fue la valentía sin premio de Jorge Martín. El madrileño entró en boxes tras la vuelta de reconocimiento para colocar neumáticos de seco, pero era demasiado tarde. Se confirmó que era la mejor opción para la carrera, pero el tiempo que perdió en el cambio de gomas -una vez empezada la carrera- y el poco drenaje del trazado sudamericano hizo que Martín tuviese que remontar desde los 50 segundos de déficit con los líderes.

Con un ritmo muy fuerte, Martín remontó hasta la undécima plaza, cogiendo cinco puntos que no le permiten mantener la primera posición del campeonato -ahora es segundo, a 10 puntos de Canet-. También hubo otros pilotos que apostaron por los slicks de salida, pero cosecharon resultados similares al del español: Arbolino, que salía desde la pole, fue décimo, y Marcos Ramírez llegó hasta la duodécima posición.

Clasificación final: