El desafío del jefe de equipo Matteo Flamigni y Bezzecchi. Comentando la Ducati en parrilla, sus modelos de referencia y mucho más. La segunda parte de la entrevista.
Se acerca el inicio de una nueva e intensa temporada de MotoGP, así como el nuevo reto de Matteo Flamigni. Telemetría durante muchos años, ahora es el ingeniero jefe del novato Marco Bezzecchi en VR46 Racing Team. Antes de comenzar oficialmente el campeonato de MotoGP 2022, tuvimos la oportunidad de hablar con él. Después de la primera parte de la entrevista, aquí está la continuación, tocando temas como las diferencias entre Yamaha y Ducati. O las ocho Ducati de la parrilla, las Desmosedici de este año, sus ‘modelos de referencia’ en sus nuevas formas. Esto es lo que nos dijo.
¿Puede contarnos más sobre el nuevo dispositivo de descenso frontal? “Si hasta ahora todos han permanecido vagos, hay una razón [risas]. Pero también resultará interesante ir averiguando poco a poco en la pista, mirando las imágenes y las carreras. No quiero decir demasiado, ¡no ayudamos a la competencia!”.
“El problema es cambiar de Yamaha a otra moto”
“Ciertamente, sin embargo, a nivel de chasis es excelente, ‘fácil’. Pero, en mi opinión, el problema es cambiar de Yamaha a otra moto. En ese caso la transición puede ser complicada, como ya han demostrado varios pilotos en el pasado. Un joven que cambia de Yamaha a Ducati probablemente pague el precio de este cuadro que no tiene el mismo rendimiento que el japonés. Sin embargo, hemos visto que la moto ha mejorado mucho y la diferencia ahora también se hace en las rectas, ya no en mitad de la curva. De momento, por tanto, creo que la moto para un novato podría ser realmente Ducati”.
Un buen cambio entonces. “Decir que, personalmente, creo que es mejor tal vez trabajar un poco más al principio para adaptarme a una moto con más rendimiento también en términos de motor, en lugar de entrar muy fuerte en las curvas y luego ser adelantado por una Ducati en la recta. También es bastante frustrante. Para poder luchar hay que forzar mucho la frenada para intentar que no te adelanten, por lo que hay que exagerar al frenar. Pero esto siempre te pone frente al problema del bloqueo delantero, o derrape, o bloqueo de la dirección, o sobrecalentamiento de los frenos. Hay mil implicaciones cuando tienes que defenderte así, pero es más fácil pasar la recta sin mucho esfuerzo, si tienes una moto que te lo permita”.
Hay ocho Ducati en la parrilla este año. ¿No son demasiados? “A primera vista te diría que, en términos deportivos, habría más homogeneidad si hubiera cuatro motos por fabricante. Lamentablemente por diversas razones esto no ha sido posible y, si el organizador ha aceptado esta situación, evidentemente habrá existido la base para hacerlo. Por supuesto que sería mejor ver más motos de diferentes marcas, pero para Ducati puede ser positivo, en el sentido de que acelera el desarrollo. Los pilotos se despiertan entre sí, mejoran el rendimiento y creo que Ducati ha sido inteligente e inteligente, explotando un poco los pliegues de las regulaciones”.
“Si realmente fuéramos a molestar a los aspirantes al título, ¡mi piloto y yo seríamos las personas más felices del mundo!”
“Tener ocho motos en pista equivale a tener 10 caballos más en el motor, es ese valor añadido que te permite corregir errores muy rápidamente. A nivel de campeonato… Si realmente fuéramos a molestar a los aspirantes al título, ¡mi piloto y yo seríamos las personas más felices del mundo! En la eventualidad, probablemente a partir de la mitad del campeonato en adelante habría órdenes de equipo, como sucedió en el pasado. Pero obviamente es un riesgo que Ducati puede permitirse correr.
Ocho pilotos con dos versiones de la Desmosedici. Al menos al principio, ¿podríamos tener más sorpresas por parte de los pilotos con la moto ‘vieja’? “Por lo general, una moto completamente nueva necesita más tiempo para ser llevada al límite que una con un año, e incluso más, de vida. Incluso en términos de fiabilidad, nuestra moto sin duda da más garantías. Sin embargo, vi que, después de algunos problemas iniciales, las D16 de fábrica comenzaron a funcionar muy bien, mostrando un gran potencial. El valor de los pilotos está fuera de toda duda, todos son rápidos. Ya veremos, esperamos hacer buenas carreras y que nos vean también entre los diez primeros, o más arriba, quién sabe.
¿En qué punto se encuentra su piloto en este momento? “Hicimos solo una simulación de carrera y enumeró muchas cosas en las que se debe trabajar. Claramente en Qatar no espero una carrera top, en cada carrera habrá muchas cosas que aprender, pero espero un Marco con muchas ganas de aprender, curioso, decidido a mejorar en cada GP. Yo creo que a partir de mitad de temporada también podemos estar en el grupo de los 10 primeros, o de los 5 primeros, ¡por qué no! Me gusta soñar, pero eso sí, con los pies en la tierra: la categoría es muy difícil y eso lo demuestra el hecho de que incluso en Mandalika los 20 primeros pilotos estuvieron a 8 décimas. Es un nivel muy alto, basta un poco para estar fuera de la Q2 o ser 20º. Pero incluso para ser décimo, también hará falta un momento de suerte o circunstancias favorables para explotar el potencial de la moto, del piloto y del equipo”.
“La presión no es muy alta, mientras que en Qatar seguramente será más estresante”
Con el jefe de equipo en su debut también. “Fue agradable debutar así en los test. Hay un poco de tensión, pero son pruebas y todos sabemos que están hechas para entender, mejorar, tomar conciencia de la situación y entender cómo moverse sin cometer demasiados errores. La presión no es muy alta, mientras que en Qatar seguramente será más estresante. Sin embargo, somos conscientes del hecho de que Marco es un novato, yo también y el equipo también. Un primer día de colegio para todos, como ya había demostrado Marco en las pruebas con el casco ‘Motoscuola’ y el P. En cuanto a mí, trabajé con muy buenos capitecnicos en el pasado: comencé con Fabrizio Cecchini en Gresini en el ’98, luego Fiorenzo Fanali, que había trabajado con Agostini. Estaba Jeremy Burgess, luego Galbusera, también he seguido a Muñoz en los últimos dos años con Vale”.
“Trabajando junto a ellos, siempre he tratado de tomar sus peculiaridades. Cuando surge un problema, siempre hago evaluaciones como “¿Pero qué habría hecho Burgess aquí?” O Fanali ¿qué hubiera hecho? ¿Y Muñoz? ¿Y qué haría Cecchini?”. Al final, el operador de telemetría está al lado del capataz, siguiendo todo lo que hace. Tuve la suerte de trabajar con ‘capitecnici’ talentosos, así como la inteligencia para robar sus secretos. Ahora los estoy usando todos, los amalgamé y tengo el “paquete Flamigni” listo para explotar. Hay que decir que desde hace algunos años no solo tengo un enfoque electrónico: pensaba en una cosa, luego miraba al capataz y el 95% de las veces había armonía. Ese fue también el resorte que me hizo decidir intentarlo”.
Articulo original en italiano de nuestros socios de Corsedimoto.com.
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