Aleix Espargaró comenta la carrera tan difícil que tuvo que afrontar ayer por el poco agarre de la pista en Barcelona. Las bajas temperaturas marcaron un fin de semana complicado para todo el Mundial de MotoGP.
Tras la caída de la última carrera de Misano, Aleix Espargaró se puede ir de Barcelona con buen sabor de boca. El español completó una carrera muy complicada, debido al poco agarre en pista con las bajas temperaturas que se han ido registrando todo el fin de semana y que provocó tantas caídas en las tres categorías del mundial. El piloto de Aprilia pudo sumar algunos puntos en la duodécima posición con muchas dificultades con los neumáticos que Michelin trajo a este gran premio, unas gomas pensadas para correr en junio, con las altas temperaturas que se llegan a alcanzar -unos 50º en el asfalto-.
«La carrera de hoy no fue fácil. Hacía mucho frío y yo era uno de los pocos que había montado el neumático delantero duro. Pero esto no sucedió porque yo quisiera, sino porque no tenía otro neumático disponible. Por lo tanto, no fui capaz de conseguir un buen ritmo de carrera», explicaba Aleix Espargaró sobre su ritmo de carrera con la Aprilia con una mala elección del neumático delantero.
«Casi me estrello unas cuantas veces, como mi hermano. Hubo caídas en las tres categorías hoy porque el agarre, a pesar del nuevo neumático, no es el mejor. Por supuesto que las bajas temperaturas tampoco ayudaron. Deberíamos consultar con Michelin para ver qué pasa con los neumáticos delanteros, ya que todos los equipos, excepto KTM, parecen tener problemas con ellos», añadía el español, sumándose a las quejas por los neumáticos de este fin de semana.
«Quiero mejorar de pista a pista y estar más adelante»
El piloto de Aprilia insistió en sus problemas que se encontró este domingo durante la carrera y todo el fin de semana: «Mi moto normalmente no funciona bien cuando hace frío. En Assen y en Alemania a menudo hace frío, así que siempre tengo muchos problemas. Creo que tenemos que pensar en el equilibrio y la puesta a punto de la moto y conseguir más temperatura en los neumáticos».
Ahora, una semana de descanso y de vuelta para el penúltimo triplete de la temporada, con primera parada en Francia y de nuevo con público en las gradas del circuito. Aleix Espargaró tiene claro cuál es su próximo objetivo: «Básicamente me gusta la pista de Le Mans, pero de momento no es fácil para mí. Estoy luchando por malos resultados, pero estoy feliz de haber podido terminar la carrera hoy, después del accidente de la semana pasada. A partir de ahora quiero mejorar de pista a pista y estar más adelante».
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