Aleix Espargaró ha mostrado cómo es un día entrenando en Rocco’s Ranch mientras hacía balance de la temporada 2025.
Aleix Espargaró será uno de los presentes este fin de semana en la TT Christmas de Rocco’s Ranch. El piloto probador de Honda no ha parado de trabajar, compaginando su rol en la fábrica japonesa con el ciclismo y, ahora, el motocross. El de Granollers estuvo en el Rocco’s para entrenar de cara a la cita navideña; y lo hizo con la mejor compañía: su hermano Pol y su hijo Max. Una jornada que compartió con sus seguidores a través de su canal de Youtube.
«Hacía mucho que no venía a hacer motocross a Rocco’s, al mejor circuito del mundo. Y hoy he venido con Max y Leo, un amigo suyo, que ya las generaciones suben», comenzaba. «Así que hoy yo haré un poco para probar la TT Christmas, que ya sabéis que es la carrera más bonita que hay, antes de Navidad, que voy a correr este año con Ricky [Cardús]».
Poco a poco, Max comienza a coger el relevo de su padre; a pesar de sus reticencias. «No lo llevo más ya, me da miedo. Venimos un par de veces al año porque tampoco es que le chifle el motocross, pero sí que se lo pasa bien. En verano hizo unas colonias aquí en Rocco’s de una semana y yo estaba corriendo el tour de Austria justo y no pude verle. Y mejoró mucho, obviamente. No lo había visto desde entonces porque desde el verano aquí no habíamos venido más, y nada, se me cae la baba verle cómo va y sobre todo que se lo pasa muy bien«, admitía.
«Después de toda la vida corriendo con Pol, me sabe mal pegarle un hachazo»
Espargaró también reconocía que «ahora la bici quita mucho tiempo», por lo que no ha podido entrenar motocross tanto como le gustaría. No obstante, tuvo a su lado a su hermano Pol, que rápidamente le puso las pilas. «Soy demasiado limpio y aún hoy con 36 años, después de toda la vida corriendo con él, me sabe mal pegarle a un hachazo», contaba entre risas. Para Pol, sin embargo, eso no eran más que excusas. «Esto es como un boomerang. ¿Qué pasa cuando tiras el boomerang?», le ‘picaba’ Pol. «Siempre vuelve. Por eso no le tengo hachazo. Porque él me quiere menos que yo a él. Entonces mejor respetar», respondía Aleix.
Tras la jornada de entrenamientos, Aleix reconocía que «días como hoy me hacen recordar por qué me gusta tanto este deporte, por qué molan tanto las motos y sobre todo ver a Max con sus amigos. Se me cae la baba». Tras un día de “relax”, Espargaró volvía a ponerse en marcha para participar en el ‘Training camp’ con Lidl Trek, y hacía balance del año.
«He combinado Honda, ser piloto de pruebas, con ser ciclista profesional. Por culpa de las lesiones y que se han pisado los calendarios no he corrido todo lo que me hubiera gustado en el ciclismo. He tenido que correr mucho más con la Honda. He hecho seis grandes premios. Cuando estaba al principio en el calendario había solo uno. Pero también me tenía que adaptar un poco a este nuevo proyecto de Honda, de piloto de pruebas, que lo he disfrutado mucho», contaba.
«El proyecto de Honda está siendo una pasada»
«Honda y Alberto [Puig] me pidieron a mitad de año, después de las lesiones, cuando vine a Barcelona, reventado físicamente por la caída con la bici, pues que obviamente para el siguiente año, el 2026, voy a tener más trabajo porque voy a tener que desarrollar la moto del 2027 también, con los Pirelli, con el motor 850cc», ha explicado. Esto ha hecho que tenga que dar un paso al lado con el proyecto de Lidl Trek, adoptando más un papel de embajador.
Aún así, no se arrepiente de su decisión. «El proyecto [de Honda] está siendo una pasada, lo estoy disfrutando igual más de lo que hubiera imaginado al principio del año. Al principio del año arranqué con mucha ilusión de ser ciclista, porque era mi sueño, era algo nuevo, estoy muy orgulloso de lo que he conseguido. Pero ahora toca igual estar más centrado en Honda, que yo creo que es donde puedo aportar más».
«Creo que el trabajo que hemos hecho hasta ahora ha sido también muy bueno. Ver a Joan [Mir] y a Luca [Marini] siendo así competitivos, terminando consiguiendo podiums, creo que es algo muy bueno, y para el 27 es un año crucial para nosotros, así que Aleix tiene que poner toda su energía y foco en Honda. Y nada, seguiremos dando vueltas por el mundo, haciendo aventuras», finalizaba.
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