
Álex Márquez se ha mostrado muy contento por el primer día en Sachsering con una MotoGP. El piloto del LCR Honda ha podido seguir probando nuevas piezas y configuraciones en la moto que le han permitido estar un poco más arriba.
Siguen los problemas de agarre en Honda, pero por lo menos se ha equilibrado con las otras mejoras que han podido ir probando. Por ello, Álex Márquez se ha mostrado muy contento este pasado viernes por la tarde, al finalizar los dos primeros entrenamientos del fin de semana en décimo tercera posición de la tabla de tiempos, justo por detrás de su hermano mayor, Marc Márquez -quien no montó neumático nuevo-. Álex sabe que la clasificación será clave para la carrera de este domingo, en una carrera a 30 vueltas y donde cometer un pequeño error puede costar muy caro.
Satisfecho con el primer entrenamiento: “Al final del primer día puedo decir, sinceramente, que estoy contento. Es mi primera vez aquí con una moto de MotoGP y he disfrutado, eso es lo más importante. He podido jugar con la moto para intentar mejorar cosas”.
Todavía con opciones a mejorar: “Especialmente tenemos que mejorar con el neumático usado, y dar un paso adelante, pero no estamos mal y podemos estar contentos con nuestro día. Todavía hay mucho trabajo por hacer y cosas que tenemos que entender mejor, pero hoy hemos introducido la nueva aerodinámica y, entre otras cosas, han funcionado bastante bien. La moto está funcionando bien. El problema del agarre sigue ahí, pero es algo que podemos gestionar un poco mejor que en Montmeló. Este fin de semana, será importante estar en la Q2 directamente, y también difícil porque todo el mundo está muy cerca, pero definitivamente es posible en esta pista”.
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