El piloto de Honda, Álex Márquez, ha hablado sobre cómo afronta este fin de semana en Misano. Además, el catalán ha explicado cómo funciona la moto y el rendimiento que le saca su hermano Marc.
Este fin de semana los pilotos de MotoGP vuelven a la acción en el circuito de Misano. Es la primera vez que Álex Márquez correrá en el trazado italiano montado en la Honda de la categoría reina. El piloto de Cervera debe aprovechar la doble cita italiana para poder mejorar los resultados de sus últimas carreras. No ha empezado con buen pie ya que ayer todas las Honda, a excepción de Nakagami, cerraron la tabla.
El pequeño de los Márquez admite que debe ganar confianza en sí mismo y su potencial. “Lo importante es que tengo mejores sensaciones aquí que en Austria“, afirma Álex Márquez. Aunque en la sesión de ayer quedó penúltimo, para los entrenamientos y la sesión de clasificación de hoy quiere dar un paso al frente intentando centrarse en encontrar la eficiencia adecuada para lograr hacer vueltas rápidas.
Además, Álex Márquez asegura que todos los pilotos de la escudería están intentando luchar por mejorar estos nefastos resultados. Sin embargo, el joven piloto no niega que él no es capaz de frenar con eficacia. “No freno como me gustaría y me falta confianza. Soy consciente de ellos y debemos solucionar de inmediato el problema“, recoge en declaraciones GPone.
Álex Márquez: “No freno como me gustaría y me falta confianza”
Parece que no es solo el pequeño de los Márquez el que tiene problemas con la Honda ya que el resto de sus compañeros tampoco consiguen entrar en buenas posiciones en ninguna de las carreras. Todos sabemos que la RC213V es una moto complicada para adaptarse y se le pide al piloto que tenga que ser agresivo en la frenada. Es decir, se pide que sea Marc Márquez. Y justo esto es lo que declara Álex. “Solo Marc sabe sacar el máximo partido al potencial de la moto, llegando al límite y sacando el 110%“, asegura el pequeño de los de Cervera.
Además, hay otros factores que tampoco le ponen fácil esta adaptación y que le dificultan aún más los problemas de la frenada. Como ya hemos visto, dependiendo del asfalto, los pilotos tienen que frenar la moto de una manera u otra. Durante estos grandes premios hemos escuchado a muchos pilotos quejarse de las malas condiciones de los asfaltos, haciendo que perdiesen tiempo, que tuvieran que modificar su pilotaje e, incluso, que a causa de esto se fuesen al suelo.
Álex Márquez intenta tomarse estos problemas con humor y bromea diciendo que ellos no pueden cambiar el asfalto. Por lo tanto, asume que es lo que hay y que deben adaptarse a cada circuito. Esto también afecta a la frenada. El pequeño de los Márquez se queja de que toda la moto se le mueve pero que su punto fuerte es en la parte más rápida de la pista, es decir, las curvas 9, 10 y 11, y es allí donde deben aprovecharse.
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