El italiano se prepara para la que será su cuarta temporada en Moto3
Tony Arbolino fue una de las sensaciones del año pasado en Moto3. El piloto italiano consiguió su primera victoria mundialista en Moto3 y sobre todo en la primera mitad de campeonato estuvo siempre en las posiciones cabeceras. Sin embargo, a final de año sufrió un dolor en lo brazos que lo relegó fuera del TOP3 en la genenal.
Este año repite en el equipo Snipers Team y el objetivo es luchar por el campeonato. El pasado 18 de enero fue la presentación junto a su compañero Filip Salac y comentó que está entusiasmado para empezar su cuarto año ya en la categoría pequeña. En una entrevista para la web oficial de MotoGP comenta como acabó el año pasado y cual es su rutina de entrenamiento de cara a este 2020.
“En la última parte de la temporada sentí mucho dolor en los brazos porque estoy creciendo mucho y eso me hizo perder mucha concentración. Todavía no está claro cuál es el verdadero problema, pero trato de relajar mis músculos tanto como sea posible con los masajes. Espero que este problema no se repita y realmente creo que fue algo puntual. Es una pena que tuviera ese problema, me sentía mucho más fuerte que Canet y Ramírez, pero al final surgió así”.
“El método de trabajo es el mismo. Al tener más experiencia, mi entrenador y yo hemos adaptado el programa. Me cuesta mucho hacer ciertos movimientos o mantener ciertas posiciones en la moto, así que estamos trabajando para adaptarnos lo máximo posible. Estoy muy preparado tanto psicológica como físicamente. En Moto3™ nunca se sabe qué esperar, pero creo que estoy listo para cualquier tipo de condición y cualquier tipo de desafío”, continuaba.
El piloto italiano asegura que referencia dentro del equipo es el jefe técnico, Josep Martínez. El español lleva ya dos años junto a Arbolino y según él esto es beneficioso ya que los análisis son más minuciosos. Por otro lado también comentaba que KTM ha dado un pase adelante importante y cree podrá volver a luchar con los pilotos del Leopard y del equipo Petronas.
Su gran amistad con Jorge Lorenzo
“¡Ojalá pudiera! La próxima vez que lo vea, lo tantearé, pero no quiero entrometerme en sus decisiones. Claro, eso sería un sueño para mí. Cuando se trata de trabajar, Jorge es una máquina, me ha cambiado mucho, ya que ha compartido conmigo su dedicación y la concentración que se necesita para hacer este trabajo. Sería el entrenador ideal para mí“, admite.
Para finalizar el italiano cuenta porque decidió rechazar una oferta para subir a Moto2 y quedarse un año más en Moto3 en busca del título. “Lo decidí con Carletto. Al final, este fue el primer año en que pude ser realmente competitivo y recuerdo haberle dicho que cuando llegue a Moto2™, quiero ser competitivo. Quiero estar listo física y mentalmente desde el primer año. Por eso he decidido quedarme un año más con el mismo equipo en la misma categoría”, expresa para finalizar.
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