Pecco Bagnaia ha terminado tercero en la tabla de tiempos combinados del Gran Premio de Portugal. A la alegría del resultado, sin embargo, se une el enfado tras la caída de Pol Espargaró.
Pecco Bagnaia ha terminado la jornada del viernes en la tercera posición de la tabla de tiempos; lo que le otorga el pase directo a la Q2. No ha sido fácil para el piloto; que tras las dos banderas rojas de la FP2, se quedaba sin gasolina a escasos minutos del final de la prueba. “Desgraciadamente todos somos novatos en este nuevo formato, nos hemos equivocado con la gasolina. Pero no pasa nada, no cambiaba tanto hacer la primera o la quinta crono; lo importante era estar entre los 10″, contaba al finalizar la jornada.
El piloto de Ducati ha protagonizado además la primera gran salvada del año. “Estoy muy orgulloso, nunca lo había conseguido, lo hice en cuarta a fondo. Estoy contento, he aguantado bien. Me he quedado un poco sin mono pero eso es lo de menos, hacía viento. El nivel de agarre no es alto para los tiempos que estamos haciendo. Estoy contento con el ritmo y el time attack”.
Los problemas con el agarre no tienen una causa clara, según ha comentado Bagnaia. “Quizás por la lluvia de esta mañana, o quizás porque han doblado Moto2 o Moto3. Las temperaturas parecen altas pero hace frío“. Aún así, no le han impedido rodar por debajo del récord de Portimao.
El mejor tiempo, no obstante, ha sido para el que fuera su compañero de equipo hasta el pasado año, Jack Miller. El australiano ha logrado el mejor registro tras una pretemporada complicada para KTM. “No me lo esperaba, ha dado un paso adelante, incluso en el ritmo. Estoy contento de que esté delante“, ha afirmado el italiano.
“Estoy muy enfadado con la seguridad de esta pista”
Sin embargo, la segunda bandera roja tras la caída de Pol Espargaró ha ensombrecido las buenas sensaciones de hoy. El piloto se ha ido contra las protecciones y ha tenido que ser trasladado al Hospital de Faro. Esto ha echado más leña al fuego en cuanto a la seguridad en el circuito; muy cuestionada estos días por el tamaño de la grava.
“Estoy muy enfadado por la seguridad de esta pista”, aseguraba Bagnaia. “Llevamos cuatro años quejándonos, hoy podemos alzar la voz, la curva sin ‘air fence’ es ridícula. Luego la grava, es un problema aquí. Desde los tests la grava ha mejorado en la primera parte pero no es suficiente”.
“Aquí la grava es un problema, hay que hacer un cambio. La segunda bandera roja me hizo preocuparme por Pol, de nuevo la grava, por desgracia. La primera vez que vinimos aquí en 2020 envié la foto de la grava a Uncini el miércoles. El año pasado volví al box con grava en la mano y todo el mundo se burló de mí. En la caída se ve que Pol va a la grava y no frena”, finalizaba el piloto.
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