Como todo un experto, Pecco Bagnaia supo imponerse a Marc Márquez en el Gran Premio de Aragón. El de Ducati se lleva su primera victoria en MotoGP desde su debut, un triunfo que ha tardado en llegar, pero que ahora sabe muy bien. Sobre todo, tras vencer a un ocho veces campeón del mundo.
Ha sido luchada su primera victoria, pero por fin ha llegado. Pecco Bagnaia ya ha ganado en MotoGP. Y, lo ha hecho, demostrando su talento, enseñando su potencial y dejando ver el futuro que Ducati tiene en su box. Sin duda, el italiano dio todo de sí para lograr la victoria, cerrándole la puerta a un Marc Márquez que venía con hambre de una nueva victoria. Fue una clase magistral de frenadas al límite que, incluso, recordó a los duelos del ausente Dovizioso con el catalán.
Márquez le acechó toda la carrera, pero el de Ducati pudo con él: “Cuando lo vi, pensé: ¡se acabó!. Me pasé toda la carrera mirando esa tabla que me mostraba +0 sobre Márquez. Pensé en todas las veces que había sido competitivo y había perdido la oportunidad, todo ello hizo que ganar fuera más dulce. Como hacerlo después de un gran combate contra Marc, será bonito llegar a la meta en solitario, pero lo es aún más. Además, nunca lo había hecho, sólo una vez en 2018, en Moto2 contra Oliveira”.
Su primera victoria en MotoGP y, además, muy luchada: “Lo mejor, ganar en MotoGP ha sido mi sueño desde que era un niño y además he ganado a Márquez, uno de los pilotos con más títulos. Aunque aún no esté al 100%, sigue siendo muy fuerte”.
“Nunca puedes imaginar cómo será una victoria, la de hoy ha sido genial. Sabía que era fuerte y también que Márquez sería el más rápido. Empecé a empujar como un loco y no paré. Al final lo hice y no fue obvio porque vine con muchas preguntas. Nunca había puntuado aquí en MotoGP, pero esta vez, desde la primera sesión de entrenamientos libres, todo fue perfecto. En la clasificación hice un gran tiempo y hoy he hecho una carrera increíble con un ritmo endiablado”.
Pensó que llegaría antes: “En mi año de debut en MotoGP tuve problemas, sólo fui cuarto en Phillip Island, pero estuve muy lejos de la cabeza. Este año he perdido un par de oportunidades: en Portimao, por las banderas amarillas en la clasificación, y en Mugello, cuando me estrellé. Cada vez faltaba algo, pero este fin de semana todo salió bien. No será fácil tener otro como éste, en el que ni siquiera he tocado la moto, pero espero ser tan rápido en Misano”.
“Acumulé mucha rabia esas ocasiones y no fue fácil de gestionar. En casa veía las publicaciones en las redes sociales, los insultos, no era fácil. Pero sabía que de las situaciones difíciles siempre sale algo bueno, y mi primera victoria en MotoGP llegó en el circuito más difícil para mí”.
“Quiero darle un gran abrazo a Rossi”
Cada piloto necesita su tiempo: “Si miramos mi carrera, en Moto3 tuve problemas antes de ser competitivo, hasta que me fui al equipo Aspar, donde me sentí bien. Por el contrario, en Moto2 fui primero novato del año y luego campeón del mundo. En MotoGP sufrí los dos primeros años, pero desde que entré en el equipo de fábrica me siento increíblemente bien. A veces es importante la situación en la que te encuentras, para sentirte en el centro de un proyecto, como yo ahora, y eso me hace estar más sereno”.
Rossi le dijo que hoy era su día: “Me puso más nervioso, nunca me había dicho algo así. Luego me tranquilicé, pensé que tenía el ritmo para estar con Márquez y que había hecho un buen trabajo, es decir, que podía ganar. Quiero darle un gran abrazo a Vale, a partir de ahora puede decirme siempre que tengo que ganar (risas)”.
Recuerda a las batallas de Márquez con Dovizioso: “No lo sé, pero puedo decir que me he divertido mucho (risas). Decidí quedarme delante porque era la mejor posición posible, cuando estás en pistas con poco agarre como esta es más fácil defender que atacar. Sabía que no me adelantaría hasta el final, habría sido inútil para él, pero cuando lo hizo me di cuenta de que no podía parar como quería porque el neumático trasero estaba desgastado. Podía haber cruzado la línea de meta, sólo pensaba en no dejarle delante ni una sola curva, de lo contrario habría sido difícil adelantarle”.
Carrera casi perfecta: “He cometido cuatro errores: dos en la curva 6 y otros tantos en la 8 (risas)”.
Pasa a Mir en el campeonato y es segundo: “Ahora mismo tengo que pensar sólo en mí, en ser tan rápido como lo fui este fin de semana, no en Quartararo. Antes de hablar del campeonato tengo que recuperar puntos, 53 son todavía muchos y tendré que quedar por delante de Fabio. Sin embargo, mi ambición es muy grande y esta victoria me da una gran motivación”.
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