
Pilotos como Stoner, Lorenzo o Bagnaia han pasado por las manos de Gabarrini y, dos de ellos, han sido campeones del mundo en él. De eso y mucho más habla jefe de equipo de Ducati en exclusiva para Tutto Sport.
Cristian Gabarrini ha sido jefe de equipo de dos leyendas como Jorge Lorenzo o Casey Stoner y, esta temporada ha ganado de nuevo un título mundial con Pecco Bagnaia y la fábrica de Borgo Panigale. En 2007, el técnico de pista del actual Campeón del Mundo ganó su primer título para Ducati con el australiano Casey Stoner ahora, quince años después, lo ha vuelto a hacer con Bagnaia.
Así pues, aunque las comparaciones son odiosas, es inevitable hablar sobre qué diferencia un piloto del otro, para Gabarrini «están a años luz de distancia como pilotos y como hombres«. «La única conexión es que ambos tienen un gran talento, son dos pilotos muy fuertes. Casey era muy impetuoso e instintivo. A veces violento en sus reacciones. Pecco es más tranquilo. Llega al mismo resultado madurando poco a poco lo que tiene que hacer. Él nunca se enfada. Si lo hace, no te das cuenta. Es una persona extremadamente reflexiva y muy inteligente. Nada de lo que hace es por casualidad. Creció para esto«, señala.
Las comparaciones siguen, pero esta vez el jefe de equipo de Ducati comenta los parecidos entre Lorenzo y Bagnaia. «Pecco es muy similar a Jorge. A menudo se queja de las mismas cosas sobre la moto y son muy buenos en determinadas situaciones y fases, son muy similares. Casi parecen descendientes del otro, en términos de estilo de conducción y enfoque del fin de semana de carrera«, analiza Gabarrini en una entrevista exclusiva en Tutto Sport.
Bagnaia aporta un punto de vista distinto al resto de de pilotos
Volviendo a la actualidad, Cristian también expone como es trabajar con Gigi Dall’Igna: «Gigi es un jefe, punto«. «Deja que cada uno de nosotros haga su trabajo. Escucha. A veces no piensa como yo, pero siempre está tranquilo en el trabajo«, añade el italiano apuntando a que Gigi siempre se muestra respetuoso con las opiniones del resto del equipo y escucha cada una de ellas.
Gabarrini ha podido ayudar a Pecco en algunos aspectos de su pilotaje como lo es la frenada. «Traté de transmitirle mi experiencia y hacer que encontrara la manera de tener una actuación. Nosotros en el equipo hemos ayudado a Pecco a realizar una frenada con fuerza. Ahora ese es su punto fuerte, pero cuando llegó a Ducati no era tan bueno«, aclara.
Cristian ha ayudado a Pecco pero el piloto también ha aportado «un punto de vista y una aproximación al fin de semana de carreras y cómo buscar un rendimiento diferente al resto de pilotos que he dirigido«. «Es único, eso es lo que marca la diferencia si logras que encuentre la clave y tratas de que haga las cosas como mejor las hace. Este es un poco el secreto de su éxito, si es que lo hay«, sigue diciendo.
La primera parte de la temporada no fue fácil para Ducati y mucho menos para Bagnaia, con un Quartararo que parecía lanzado a revalidar el título y con una Ducati que parecía tener problemas. Gabarrini intentó mantener la calma y seguir siendo sincero y transparente, diciéndole cuáles eran las condiciones adecuadas para expresarse lo mejor posible. «Al final depende de su inteligencia, porque es él quien marca la diferencia«, sentencia.
(Fuente: Giorgio Pasini, Tutto Sport, 08.11.2022)
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