
Enea Bastianini prueba la nueva Ducati en los test de Jerez mientras su nuevo compañero de equipo, Fabio Di Giannantonio debuta con la MotoGP en sus primeras pruebas.
Aparcando ya la Ducati que llevaba este 2021, Enea Bastianini ya tiene en sus manos la nueva máquina. Se trata de una Desmosedici como la que Peco Bagnaia llevaba este curso y con la que, además, le plantó cara a Fabio Quartararo. Se tuvo que conformar con el subcampeonato por sus fallos al inicio del año, pero el italiano ya metió miedo a sus rivales en la última parte de la temporada, con hasta cuatro victorias y un ritmo descomunal que muchos no han logrado coger. Por ello, Bastianini ya disfruta con la GP21, la cual ha podido probar en las dos jornadas de test en Jerez y de la que, dice, es mucho mejor que la GP20 en todos sus aspectos.
Resumen del test de la pasada semana: «El jueves fue un buen día, pero este viernes tuvimos que lidiar con el viento, así que no quería comprometer lo que habíamos construido. He podido seguir siendo rápido, incluso en el ritmo, probando para entender lo que podría ayudarme, sin cambiar la moto. Estas pruebas han sido importantes y las próximas lo serán aún más».
La Ducati nueva frente a la de 2021: «Comparada con la anterior, esta Ducati es mejor en todas partes, tanto en la entrada como en la salida de las curvas. Obviamente es diferente, de hecho me costó dos sesiones entenderlo, pero al final sigue siendo una Ducati con el mismo ADN. Es muy divertido, teniendo en cuenta que incluso con viento pude ser competitivo».
Expectativas iniciales cumplidas con el test de Jerez: «Esperaba que esta Ducati fuera tan buena, es un placer conducirla. Desde la perspectiva de la carrera es una gran moto. Ahora que los exámenes han terminado vamos a disfrutar de unas pequeñas vacaciones, sin excedernos, porque tenemos que prepararnos bien para 2022 si queremos estar a la altura de los mejores».

Di Giannantonio debuta con la MotoGP
Al contrario que su compañero de equipo, Fabio Di Giannantonio llega de nuevas al box del nuevo equipo Gresini. El italiano ha dado el salto de la categoría intermedia a la máxima, con una de las ocho Ducati que ocuparán la parrilla de salida del Mundial de MotoGP. Uno de los rookies del año ha usado las dos jornadas del test de Jerez para comenzar a entender la moto, aunque con ganas de acumular más kilómetros y agradeciendo el apoyo que Gresini ha mostrado siempre en su talento.
Satisfecho con el segundo día en Jerez: «Estoy muy contento con este último día. El viernes por la mañana hemos hecho una gran salida desde la primera vuelta, igualando el tiempo de ayer. A continuación, nos concentramos en la electrónica para entender cómo utilizarla de la mejor manera. Desgraciadamente, el viento arruinó el día, ya que las condiciones eran críticas, especialmente en las curvas rápidas, pero aun así estoy contento».
Nuevo capítulo en su carrera: «Mentalmente estaba probado cuando llegué a Valencia, pero ahora no quiero parar, porque es como si hubiera empezado un nuevo juego y sólo quiero seguir en la pista, correr y probar (sonríe). Pero ahora tengo mis vacaciones, que me permitirán recuperarme y prepararme para 2022. Nos espera un nuevo reto con una moto como Ducati, y tenemos que estar preparados.
Su nuevo equipo: «Gresini es un equipo que siempre ha creído en mí, llevándome a MotoGP. Empecé con Moto3 y hoy estoy aquí en la máxima categoría, creo que es una locura».
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