Al parecer, Yamaha ha solicitado abrir los motores con válvulas defectuosas para sustituir las piezas y así resolver los problemas que llevan apareciendo desde el Gran Premio de España. Para ello, requiere la aprobación del resto de fabricantes y Honda no parece poner demasiado interés.
La eterna pesadilla de Yamaha en MotoGP durante la temporada 2020: los motores. Los problemas mecánicos vienen acaecidos desde el inicio del curso en el Circuito de Jerez-Ángel Nieto, cuando Valentino Rossi tiene que abandonar la primera carrera del año por un desajuste en el motor. Del mismo modo Maverick Viñales sufría de motor en uno de los entrenamientos libres del fin de semana posterior, también en Jerez. Y no sólo eso, sino que Franco Morbidelli tenía que abandonar la carrera mientras brillaba luchando en posiciones de podio. Demasiados contratiempos con los motores, muy inestables, en un período muy reducido de tiempo. ¿Qué le está ocurriendo a los motores de Yamaha?
Desde la primera cita del calendario en el Gran Premio de España, Yamaha ha sido la fábrica que ha protagonizado el arranque de la temporada, y con una clara superioridad. Incluso en el Gran Premio de Andalucía, fueron tres Yamaha las que ocuparon los puestos de honor. Pero detrás de todo este triunfo y buenas actuaciones, tanto Viñales como Morbidelli han destapado ya los cinco motores permitidos siguiendo el reglamento para lo que resta de año. Rossi y Quartararo cuatro de ellos. Y esto viene acompañado de un fuerte problema para la fábrica por esta pieza clave de las M1, teniendo en cuenta que no hemos llegado ni al ecuador de la temporada.
Como intento de solución, se eliminó de la lista de asignación de esos cinco motores ese lote en particular y se envió a Japón para localizar y analizar el desorden de estos motores concretos. Lo importante era la espera de resultados de esos análisis, cuya conclusión parece ser un problema con válvulas defectuosas en los propulsores como el origen de los problemas sufridos anteriormente. Si estuviéramos hablando de piezas defectuosas, se estaría limitando de esta forma el número de motores asignados en la normativa para cada piloto en Yamaha.
Se trata de una situación delicada para la fábrica. Y en este sentido, el reglamento permite que el propio fabricante solicite a la MSMA (Asociación de fabricantes) solicitar abrir los motores sellados para poder reemplazar dichas válvulas defectuosas. Sin embargo, para ello necesita la autorización del resto de fábricas de MotoGP y no todas ellas tienen intención de poner todo de su parte. La solicitud de Yamaha de solventar este problema puede ser replicado, puesto que no hay nada que verifique que el objetivo es reemplazar esas piezas o mejorar el rendimiento de sus M1.
Pero la situación de los motores en Yamaha cada vez parece verse más crítica. Tan sólo Fabio Quartararo tiene utilizables los motores asignados, pero sí abiertos ya. Desde Yamaha, aseguran la necesidad de llevar a cabo esa sustitución por motivos de seguridad, pero el resto de fábricas exige mayor transparencia e información antes de dar el visto bueno. “Todos los pilotos de Yamaha se han quedado sin motores desde el segundo Gran Premio. Los otros fabricantes debemos comprender claramente qué está causando el problema. Entonces se podría tomar una decisión“, asegura Ciabatti, Ducati, en unas declaraciones recogidas por Speedweek.
Desde el Gran Premio de la República Checa, se sospecha que para no tomar más riesgos de los necesarios, Yamaha tuvo que reducir el rendimiento de los motores 2020 en las M1 con las revoluciones limitadas. Y por ello la única máquina de la fábrica que despuntó en Brno fue la de Morbidelli, que cuenta con especificaciones del pasado año y de 2020. Lo que sí está claro es que para la cita austriaca, los motores de Yamaha reducen 300 rpm.
Teniendo en cuenta que es necesaria la aprobación de los demás fabricantes, la situación pende de un hilo. Parece que Honda por el momento no tiene interés en autorizar el caso disintiendo en los motivos proporcionados y desentendiéndose de la cuestión. Y es trabajo de Yamaha demostrarlo. Algún motivo que podría llevar a Honda a despreocuparse de ello podría ser la apertura de posibilidades de título al regreso de Marc Márquez, si esto no beneficia así a los pilotos de Yamaha que encabezan la clasificación.
Valentino Rossi sobre los motores: “Para estas cosas hay que hablar con Yamaha, yo no sé mucho”
Esto sería un grave problema para la fábrica y sus pilotos, puesto que si fuera necesario dotarlos de un nuevo motor al margen de los 5 por reglamento, tanto la competitividad como el título podrían verse perdidos. Lin Jarvis, como director general de Yamaha, confía en la situación y considera que “no creemos que vayamos a entrar en esta situación“.
El propio Valentino Rossi prefiere no hablar sobre el tema, y centrarse en resolver los problemas que están envolviendo a Yamaha en estos momentos. “A toda velocidad seguimos sufriendo. En cualquier caso, nuestra moto parece tener otros problemas también, así que tenemos que intentar solucionarlos. Mencionaron que abrirían los motores, pero quiero centrarme en mi trabajo y en lo que tenemos que hacer para mejorar la puesta a punto de la moto. Para estas cosas hay que hablar con Yamaha, yo no sé mucho“, reconoció en unas declaraciones recogidas por PaddockGP.
De momento toca esperar hasta conocer la decisión unánime tomada por la Asociación de fabricantes ante la desesperada pesadilla de Yamaha.
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