Remy Gardner consiguió puntuar en su primera carrera en MotoGP, a pesar de su ‘pelea’ en la pista con Darryn Binder.
Remy Gardner sumó su primer punto como piloto de MotoGP en el Gran Premio de Qatar. El piloto australiano, vigente Campeón del Mundo de Moto2, luchó durante toda la carrera con el resto de rookies de la categoría, además de Andrea Dovizioso y Maverick Viñales. Precisamente, fue a estos dos veteranos a quienes Gardner intentó seguir bajo los focos del desierto qatarí, pero Darryn Binder, otro de los debutantes, no se lo puso fácil. De hecho, el australiano no estaba muy contento con el comportamiento del sudafricano al terminar la carrera.
Cuando Gardner trataba de alcanzar a Dovizioso y Viñales y seguir su progresión en la carrera, Binder comenzó a pilotar de un modo ‘peculiar’. El piloto del WithU Yamaha ya tenía la fama de agresivo en Moto3, categoría desde la que ha llegado directamente a MotoGP. El paso de Moto2 a MotoGP, como el que han dado el resto de rookies de la categoría, no es tan brusco como el paso de Moto3 a la categoría reina. Y esto quizás afecte a Binder en estas primeras carreras.
«Creo que necesito reunirme con Darryn y hablar con él en algún momento. Éstas no son motos de Moto3. No tiene que pilotar como un mono. No luchábamos por la victoria en Doha, sino más o menos por el último puesto. Un poco más de respeto hubiera estado bien«, dijo el australiano en declaraciones a Speedweek, quien también mostró comprensión por su rival. «Por un lado, es normal, porque era su primera carrera de MotoGP y viene directo de Moto3. Pero espero que las cosas mejoren un poco en el futuro».
Binder: «Fue realmente aterrador al inicio de la carrera»
Por su parte, Darryn Binder se mostró satisfecho con el resultado que obtuvo en su GP de debut en MotoGP. El sudafricano, cuyo fichaje por el WithU Yamaha estuvo cargado de controversia, se había marcado unas metas modestas y realistas para esta cita en Qatar. «Aprendí más en las 22 vueltas de carrera que en las más de 100 de los test. El fin de semana no ha sido fácil, seguía teniendo problemas y la caída en la clasificación tampoco fue lo ideal. Sentí que podría haber sido mejor en cada sesión de entrenamiento, pero nunca lo logré».
Por sus declaraciones, puede deducirse que Gardner no iba desencaminado en sus afirmaciones respecto a la adaptación de Binder. «Mi objetivo principal era terminar la carrera y aprender lo máximo posible en las 22 vueltas. Tuve un buen comienzo, aunque estaba un poco asustado al entrar en la primera curva. No sabía si los frenos estaban lo suficientemente calientes y cómo se comportaría el depósito lleno al frenar, lo que me puso un poco nervioso. Pero al final de la primera vuelta me di cuenta que era bastante rápido en comparación con los pilotos por delante de mí. Así que comencé a adelantarlos», ha dicho.
El sudafricano también habló de las diferencias entre la MotoGP y la Moto3. «La diferencia es enorme. Fue realmente aterrador al inicio de la carrera. Además, cuando frenas detrás de un piloto, realmente te atrae, así que tuve que concentrarme mucho. Tenía miedo de que si frenaba en mi punto de frenado normal ya no podría tomar la curva. Al final, pude adelantar a algunos pilotos, lo que me dio confianza», concluye.
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