Pietro Bagnaia recuerda la relación que tuvo Pecco con Jorge Martín, pues en seguida congeniaron y formaron un gran equipo.
Pietro Bagnaia, progenitor de Pecco Bagnaia, cuenta cómo fue la llegada de su hijo en el cerrado circulo Valentino Rossi, su paso por el Team Aspar y la violencia de las redes sociales que se sufre actualmente. Resalta de su hijo la tranquilidad y su manera de observar, así como también su inteligencia.
Empieza recordando los malos inicios de Bagnaia. «Era todo el sistema el que no funcionaba. Ese era un equipo… relaciones incorrectas, personas siempre enojadas, no enseñaban. Pecco un día, con 16 años, vino a mí para decirme: ‘mi sueño y mi amor por este deporte hoy se está convirtiendo en una pesadilla con este equipo’. Esta cosa no podía funcionar, no me gustaba. A lo que yo, gracias a un amigo mío, quería que hiciera una prueba con la Mahindra, pero así, mientras estaba en el campeonato, en el verano«.
«Recuerdo que estaba la persona a cargo del equipo de Italia que me dijo: ‘Si Pecco hace ese test, si quieres que lo haga, te dejaré hacerlo, pero luego Pecco nunca volverá a correr en la vida’. Yo le dije: ‘a mí no me interesa si Pecco no sigue siendo piloto, él está haciendo su camino en la vida, hoy está haciendo deporte y si después no corre más, lo superáremos; Pero él quiero hacer ese test y yo quiero que lo haga’. Me hizo firmar la declaración y cuando vi la firmé y dije ‘que se jodan, se acabó con el Team Italia‘. Nos fuimos y justo de combinó que ese año nació la VR, la Academia de Valentino Rossi. A Pecco ya le había dicho que el siguiente año basta porque eran dos años de contrato con el Team Italia«, continua Pietro Bagnaia.
La llegada al círculo de Valentino Rossi
¿Por qué estaba prohibido correr el año siguiente? «Yo les dije, ya después de esa liberación: ‘Pecco el año que viene ya no estará aquí, no volverá a correr nunca, no importa, pero ya no estará aquí porque no están dando un buen ejemplo a los chicos. No me gusta lo que les enseñan. Es más, no les enseñan nada’. Luego hablando un poco con Uccio, me llama y me dice: ‘nosotros estamos haciendo esta cosa, no es nada seguro, pero… Pecco en España le ha ido muy bien, aquí no lo está haciendo, pero lo más probable es que haya una situación que no va… Podría venir con nosotros, ¿qué opinas? Y dije: ‘me siento honrado’. Cuando se lo dije a Pecco, era sí a todo, él quería ir. Y así empezó todo«.
Ese es el contacto con el mundo de Valentino, pero después el hace un año en Sky. «El primer año, cuando Valentino abrió la Academy, hizo un equipo con Sky y fueron Fenati y Pecco, pero ahí era solo el primer año. Así que habían elegido personas para hacer el equipo que luego durante el año tuvieron que cambiar a algunos e incluso cambiar de estrategia en el camino. Pecco estaba en la parte del equipo donde muchas personas habían sido cambiadas. Fue un año un poco así donde fue el comienzo, el rodaje, el acoplamiento al equipo. Y en aquel momento sucedió algo con Fenati, pero no lo contaré, porque no suma. Pecco no creo que haya querido ni siquiera llegar a la esquina con Fenati porque era una cosa un poco fea. Y luego, en ese momento ahí, Gino se entera de esta situación«.
«Pecco fue el primer piloto de la Academy que no del círculo de amigos de Valentino»
Gino Borsoi aparece en escena, ¿no? «Yo recuerdo que estábamos creo que, en Misano, llega Lele Martinelli, que había sido el jefe de del Husqvarna. Me llama y me pregunta si era verdad que Pecco el año siguiente no corría con el Sky. Y le dije si era cierto: ‘hay algo que no funciona, pero no lo voy a contar’. Un minuto después llega Gino y dice ‘¿y esta cosa aquí?’. Digo si, hablen con la VR. Tres minutos después habíamos hecho todo y Pecco fue a correr con Jorge Martín. Entre Pecco y Jorge hubo química inmediatamente, un entendimiento increíble y de hecho fueron muy fuertes y han sido muy unidos y fuertes de inmediato«.
En un momento dado se transfiere a Misano, ¿no? «Pecco se fue a vivir haciendo el deporte en el año de Sky. Él me decía que nunca conducía su moto y nunca entrenaba, ¿Cómo hago? Voy allí y siempre van en moto, ellos se entrenan, yo nunca hago eso. Tenía razón, así que decidió irse a vivir a Pesaro con casi 17 años. Su madre, por un cierto tiempo me odiaba, pero ella vio lo mismo que yo vi en sus ojos, el hecho de querer, esta determinación. Seré piloto, no lo sé, pero al menos tengo y quiero intentarlo. Pecco fue el primer piloto de la Academy que no era de ahí, del círculo de amigos de Valentino. Entonces ahí Uccio le dijo a Valentino: ‘Si a Pecco le importa tanto, nos tiene que importar mucho a nosotros también’. Luego ellos le han acogido tan bien y le han ayudado a crecer y ahora Pecco ya hace 10 años que vive solo«.
Las mejores características de Pecco
Una vez hablé con Pedrosa, y me dijo que tenía que darle las gracias a su hermano pequeño porque él ha hecho mi carrera sin ser piloto. ¿En vuestro caso ha pasado lo mismo? «Entre Pecco y Filippo hay 10 años. Cuando Pecco cumplió los 18 años yo ya dejé de ir a las carreras, las veía, pero como apasionado. Cuando era pequeño sí, porque eres menor de edad y es necesario que estés ahí«, señala Pietro Bagnaia.
¿Y en qué momento dices, ‘es el momento de apartarme’? «Si hubiera podido, de inmediato. Pero cuando son menores de edad no puedes, porque es una responsabilidad y tienes que acompañarlo, para vuelos de avión, no puedo tomar un avión solo. Cuando estaba en España yo o mi mujer siempre le llevábamos. Y con Filippo, que es el hermano de Pecco, también ha montado motos, pero con una actitud diferente, no le gustaba tanto competir… le gusta ir en moto, pero no hacer las carreras«.
¿Cuál es la característica que más te gusta de Pecco como ser humano? «Es un chico super disponible, inteligente, muy tranquilo… Te daré un ejemplo. A veces me habla de las motos y me dice: ‘pero sabes que he visto, en esa curva… Martin o el otro, yo lo hago así, pero él puede lograr hacer esta otra cosa’. Es decir, él observa las motos, mira las carreras con la técnica, el gesto atlético, con entusiasmo. A el realmente le gusta mucho, así que ve muchas cosas, ve este deporte en un cierto modo«.
La crueldad de las RRSS
Su personalidad, ese entusiasmo… no lo transmite, parece una persona tranquila. «Tranquila sí, pero porque aquí existen cosas raras. Este mundo donde se tiende muy a menudo a pedirle a los pilotos para el público, se les pide ser algo que no son naturalmente, pero para hacer el show algunos dicen si está bien, lo hacemos y a otros no les importa«.
¿Es distinto fuera de aquí? «No. A ver, él es un tipo muy simpático, es un gran amigo, una persona respetuosa, se divierte. Pero, así como aquí, es lo mismo, es igual, solo que obviamente cuando trabajas, estás concentrado«.
¿Y le molesta la injusticia? «No es que le moleste, ha aprendido. Escucha, en este nuevo mundo que son las redes sociales, el juzgar… tener a alguien que ni siquiera tiene idea de lo que estás haciendo, pero juzga. Ahora hay una maldad… Pienso que todas esas personas que escriben en las redes sociales se deberían beber una buena medicina de vez en cuando para todo eso que dicen. Se necesitaría que antes de hablar, al menos una vez, tuvieran la fuerza y las ganas de ver una carrera en vivo. Yo no podría decirle nunca a alguien que lo que dice está mal porque yo lo vivo, lo escucho, sé lo que está pasando. Y luego alguien sale a decir lo más incorrecto del mundo. No me permito, tal vez incluso si lo dice de una manera ignorante y con maldad, no me permito decirle que está diciendo una estupidez«.
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