Diego Gubellini, en una entrevista por Skype con moto.it, ha hablado de cómo es trabajar con una promesa del motociclismo como es Fabio Quartararo.
Diego Gubellini, uno de los hombres de confianza de Fabio Quartararo en la actualidad, lleva compartiendo sus conocimientos en el deporte de las dos ruedas desde hace dos décadas. El curso pasado formaba tándem junto a Franco Morbidelli en Honda y este curso es el encargado de formar equipo con el rookie del año, Fabio Quartararo. El francés acumula en las doce pruebas hasta el momento disputadas tres podios y tres pole position. De hechos, muchos lo catalogan como el potencial sucesor de Valentino Rossi en las primeras espadas de la Yamaha.
La primera temporada con ‘El Diablo’
En una entrevista por Skype, el jefe técnico de ‘El Diablo’ hablaba de su trabajo con el francés y de la larga y éxito trayectoria que aún le queda por recorrer. Lo que es un gran honor, viniendo de las palabras de una persona que ha trabajado con los mejores pilotos de MotoGP. “Fue emocionante experimentar el debut de Fabio en MotoGP. Comenzó con gran humildad: es muy joven, tenía 19 años cuando hizo las primeras pruebas. Comenzó escuchando lo que le pidió el equipo: esto le quitó presión para enfrentar el nuevo desafío. Como todos los pilotos fuertes, el objetivo siempre ha sido claro en su cabeza: ganar. Pero su enfoque fue fundamental “.
“Ya en las últimas carreras de 2018 en Jerez se había visto algo interesante: el ritmo ya era bueno. Desde el principio fue consistente, el ritmo de la carrera no estaba lejos de Morbidelli. En Sepang 2019, en los test de invierno, resultó ser muy consistente, luego también llegó a ser rápido en la vuelta rápida, conquistó la pole en Jerez. Desde entonces siempre ha estado entre los primeros, más allá del problema físico que lo ralentizó en algunas carreras (síndrome compartimental en el brazo derecha)”, explicaba Gubellini al medio ‘moto.it’.
“Con un novato, a veces sucede que durante los test no es posible hacer el trabajo óptimo, el equipo y el piloto deben conocerse: en algunas circunstancias, como sucedió en Mugello, no se encuentra la configuración correcta. Cosas normales, pero siempre ha estado en las primeras posiciones. Cometió algunos pequeños errores, como en Silverstone, cuando se estrelló en la primera curva. Pero después de Jerez siempre ha estado entre los primeros cinco/seis “.
Es por eso que aún no ha ganado
A pesar de haber realizado una primera temporada para el recuerdo donde el francés logró acabar como rookie del año, la inexperiencia y la mala suerte en algunas ocasiones hicieron que la victoria fuese el punto máximo de un primer año muy bueno. Sin embargo, para Gubellini la falta de material oficial fue el determinante de que no se produjese la primera victoria francesa en mucho tiempo.
“Le faltaba algo de motor. No olvidemos que, números en mano, 2019 fue el mejor Márquez, quizás uno de los más fuertes en la historia reciente: solo Valentino (Rossi) había hecho algo similar en el pasado. En las carreras en las que Fabio jugó la victoria (Misano y Tailandia), la diferencia en el motor fue claramente visible y Marc aprovechó al máximo estas cualidades. Para ganar con Yamaha, tenías que intentar escaparte e imponer el ritmo de carrera, precisamente por la falta de velocidad”.
A pesar de ello, para una primera temporada en la categoría reina puede ser más fácil de pilotar una Yamaha que una Honda. “Sí y no. Definitivamente la M1 es una moto intuitiva, pero Fabio llegó a Yamaha en un período oscuro para la casa: a este respecto, no fue fácil hacerlo bien. No es fácil hacer lo que hizo: debemos reconocer que, usando una moto intuitiva, ha hecho más de lo que se esperaba de él”, contestaba el italiano. “Comenzamos con la configuración utilizada por Viñales, la más rápida en Yamaha en 2018. Los otros pilotos de Yamaha exploraron diferentes soluciones, mientras teníamos una base. Ciertamente, Fabio motivó a los otros pilotos de Yamaha “.
De moto 2019 a 2020
A pesar de ello, siendo consciente de aquellos aspectos que le habían lastrado en 2019, Quartararo comenzó a trabajar durante estos test centrándose en el nuevo motor.
“Fabio demostró ser muy inteligente, inmediatamente se enfocó en el motor: usamos los días de prueba para mejorar este aspecto. Es muy preciso en sus comentarios, tiene la capacidad de identificar lo que no lo hace ir rápido, nos ayuda en nuestro trabajo. En solo 5 días casi logramos cerrar la diferencia con Viñales, el que fue más fuerte en las pruebas. Fabio no te dice lo que necesita, no elabora técnicamente, pero te dice: no puedo hacer esto o aquello. Entonces depende de nosotros interpretar sus solicitudes”, reconocía Gubellini.
Y, no solo en la moto se centró la pretemporada de ‘El Diablo’, durante estos meses se ha podido ver como el francés centra su tiempo libre en entrenar para ganar resistencia y físico necesario para el cuerpo a cuerpo. “En muchos aspectos pequeños. Es rápido en la vuelta rápida, tiene un gran ritmo de carrera; pero a nivel físico, solo porque es joven, sufre un poco al final de la carrera, creo que debido a un problema muscular “.
Nuevos objetivos
Es por ello que, esta temporada, el ’20 de MotoGP parte como uno de los favoritos en la lucha por el mundial. “Estoy seguro de que no tendrá problemas para manejar la presión de tener que obtener un resultado, precisamente por la mentalidad que tiene. La principal diferencia está en la mentalidad: es bastante crítico consigo mismo cuando está equivocado. Constantemente trata de convertirse en el mejor: por eso digo que no tiene la presión del segundo año” .
Pero, ¿cómo es realmente Fabio Quartararo como persona? “Es realmente especial. Es muy humilde, siempre se enfrenta al problema. He trabajado con muchos pilotos, pero casi nunca escuché a un piloto preguntar: ¿qué puedo hacer para ir más rápido? Por lo general, te preguntan: ¿cómo puedo mejorar la moto? Es un niño divertido y alegre: pasa de los momentos de ira, cuando no puede conseguir lo que quiere, a la felicidad en tres segundos. Tiene la ligereza del niño”, explicaba Gubellini.
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