Andrea Iannone podrá volver a competir a partir de noviembre; tras cuatro años de inhabilitación por un positivo en dopaje en Malasia 2019. El italiano dará el salto a WorldSBK de la mano de Ducati.
Andrea Iannone volverá a la competición tras cumplir su sanción. El piloto italiano, que en 2019 corría en MotoGP de la mano de Aprilia, dio positivo por Dostranolona en un control antidopaje durante el Gran Premio de Malasia. Tas muchas idas y venidas, el TAS (Tribunal de Arbitraje deportivo) pasó de una inhabilitación inicial de 18 meses a los cuatro años que finalmente tuvo que cumplir Iannone.
Aún así, el italiano siempre ha tenido claro su intención de volver a la competición tras cumplir el plazo. Algo que podrá hacer en 2024; cuando regresará a WorldSBK con GoEleven Ducati. Iannone ya compitió con los de Borgo Panigale en su época en MotoGP; una etapa que recuerda con especial cariño, según ha contado en una entrevista concedida al medio ICON Magazine.
En estos cuatro años, Iannone se ha mantenido sereno a pesar de que siempre ha defendido su inocencia. Según el piloto, el origen de la Dostranolona se encontraba en carne contaminada. “La rabia no sirve de nada, sólo pierdes lucidez. El secreto es pensar en seguir adelante: en la vida siempre pueden ocurrir desgracias. Miremos el lado positivo: podría haber sido peor, en el motociclismo ocurren tantos accidentes graves”.
“Hoy estoy aquí, más cargado que nunca, con otra madurez, con otra motivación. No he perdido el amor por este deporte, no he perdido las ganas y tengo muchas ganas de redimirme. Lo que ha sido ha sido, es inútil volver sobre ello, ‘también porque ya lo sabéis todo sobre la sentencia: basta con ir a la página web de TAS”, ha afirmado.
“No habría dejado Ducati; dejé mi corazón allí”
Aún así, Iannone es consciente de que a lo largo de su vida y de su carrera ha cometido errores. “Todos los cometemos. Cuando oigo a alguien decir ‘yo lo haría todo igual’ me parece una gran tontería, quiere decir que nunca ha hecho nada mal en la vida. En cambio, a veces hay que reflexionar, hacer examen de conciencia. Con la mentalidad que tengo hoy, muchas cosas las haría de otra manera”. En este sentido, el piloto lo tiene claro. “No habría dejado Ducati. Tenía opciones: elegí una y no otra, pero dejé mi corazón en Ducati”.
El italiano reconoció haber trabajado mucho a nivel físico y mental en este tiempo. “No fue fácil, pero logré encontrar mi serenidad rápidamente. Tienes que encontrar la clave psicológica. Es como cuando tienes una mala carrera: inmediatamente quieres hacer otra y, si no puedes, te vas a casa y entrenas como un loco para no pensar en ello, para motivarte y llegar aún mejor a la siguiente carrera. Eso es lo que he estado haciendo estos años: nunca he dejado de entrenar, siempre he seguido actuando como si siguiera siendo un piloto de MotoGP“, afirmaba Iannone.
Un trabajo que puede permitirle regresar a la competición de la mejor forma posible. “Seguro que he perdido mucho en estos años, pero lo importante ha sido reaccionar de forma positiva. Claro que me gustaría recuperar muchos momentos felices, pero en estos años siempre me he sentido libre. Ahora estoy bien, pensemos en 2024. No será fácil porque el nivel es muy alto. Pero lo que me gusta es que siento en mí la voluntad de jugármela, de sacrificarme, porque la vida de un piloto es también una vida de sacrificios. Espero poder volver a hacer lo que me gusta: pilotar la moto a 300km/h, tan fuerte como pueda, sintiendo esa ligereza allí. Es mi vida”, finalizaba.
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