
Después de bastantes meses, Jorge Lorenzo volverá a pista mañana miércoles para rodar con la M1 en Portimao. Sus intenciones pasan por continuar el próximo año como piloto probador.
El Campeonato del Mundo de MotoGP regresa a la acción este fin de semana para iniciar un nuevo triplete de carreras, cuyo primer escenario será el Circuito de Le Mans. Aunque mañana miércoles, varios pilotos de MotoGP también tendrán la ocasión de disputar una jornada de test en el trazado que pondrá punto y final a la temporada 2020, Portimao. Jorge Lorenzo será uno de ellos, y volverá a su zona de batalla para continuar con su proyecto como piloto probador de Yamaha.
Tras varios meses de escasa actividad del equipo de pruebas de Yamaha, Jorge vuelve a presentarse en unos test con fuerza para seguir trabajando en la evolución de la M1. La figura del piloto probador le ha aportado una gran motivación desde que tomó la decisión de colgar el mono de carreras el pasado año. De este modo, las intenciones del mallorquín pasan por prolongar su labor a bordo de la Yamaha de cara a 2021.
Una completa montaña rusa es lo que hemos visto hasta ahora con la fábrica de los diapasones. Una doble cara de moneda en la que Yamaha ha protagonizado varios de los mejores momentos de la temporada, así como de los peores. Tal y como ha reconocido el propio Lorenzo en exclusiva para el Diario AS, su objetivo principal pasa por hacer un setting base bueno para la M1. «El objetivo es hacer un cambio bueno, para que cuando lleguen los pilotos oficiales tengan la moto más o menos a punto«.

Por tanto, Jorge tendrá un arduo trabajo en esta jornada de test multiplicado por dos. No sólo por el desarrollo de la moto, sino porque volverá a pilotar después de muchos meses de inacción. «Quiero reencontrarme con la moto, porque pasar nueve meses sin rodar en una MotoGP es muchísimo. Nunca había tenido tantos meses de parón y no será fácil. Además, es un circuito nuevo y complicado por lo que dicen«.
El mallorquín deberá adecuarse mañana lo más rápido posible para obtener resultados y ganarse su puesto, ya que su pretensión es continuar de la mano de Yamaha como piloto probador. «Me gustaría seguir de probador, creo que es, para mí que me gustan las motos, un trabajo casi perfecto. Sólo me falta en él la sensación de ganar y luchar por un Mundial. Te quita casi toda la presión. Me gustaría seguir, y la prioridad es seguir con Yamaha. Espero que después de este test estén contentos con mi labor y quieran continuar«, confiesa para el mencionado medio.
El nombre de Jorge Lorenzo ya resonó en los medios tras unas declaraciones de Fabio Quartararo al aterrizar hace unas semanas en Misano. Principalmente, porque la fábrica de Yamaha con Lorenzo no estuvo presente en los test del trazado durante el mes de junio para probar el reasfaltado. En esas declaraciones, el francés aseguraba no entender porque no rodó y que era extraño. Según Jorge, parece que los motivos pasan por el Covid-19. «El coronavirus complicó todo. Por el tema logístico de los viajes de los mecánicos de Japón a Europa, no sé exactamente por qué, pero no se pudo hacer porque no podían viajar con facilidad y se cancelaron todos nuestros entrenamientos«, concluye.
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