Jorge Martín regresa al circuito en el que su vida podría haber cambiado y lo hace con la mentalidad puesta en hacer borrón y cuenta nueva.
Este fin de semana Jorge Martin llega a un circuito critico para él, un trazado en el que hace unos meses se fracturaba hasta ocho huesos. Un momento importante para el madrileño donde incluso se llegó a plantear abandonar el sueño de ser piloto. A pesar de ello el de Ducati vuelve con ganas de hacer borrón y cuenta nueva y quitarse la espina que se le quedó clavada y que le podría haber cambiado la vida.
El incidente que podría haber cambiado su vida. «El accidente en Portimao me cambió la vida, porque no sabía si iba a poder volver a pilotar. Y me pudo cambiar la vida tanto en lo psicológico como en lo físico. En lo psicológico porque estuve a punto de dejar de correr; me lo llegué a plantear. Y en lo físico porque me hice mucho daño en la mano del gas y el freno, y no sabía si iba a poder pilotar igual«.
Un fin de semana importante
Cómo podría haber cambiado. “Yo creo que me la podría haber cambiado mucho de dos formas, tanto en lo psicológico, porque estuve a punto de dejarlo, muy cerca. Eso ya habría sido un cambio grande, de hacer un pódium en Qatar en MotoGP a dejar las motos, pues habría sido un cambio heavy”.
Vuelta a su circuito crítico. «Cuando me dijeron que íbamos a volver a Portimao, pues me dio un poco de miedo. Le dije a mi equipo que iba a dar positivo por coronavirus«.
La lucha por el rookie del año. “En esta pista no voy a pensar en el rookie, simplemente intentar disfrutar, intentar aprender sobre todo de cara al futuro. Al final este año me he perdido muchas carreras, he tenido caídas, he tenido problemas físicos y bastante estoy haciendo para la situación en la que la que estoy. Así que… más viniendo a esta pista que sufrí tanto y que pudo decidirse un poco en mi carrera deportiva, creo que el objetivo es intentar disfrutar. Al final es un sitio donde he aprendido mucho y bueno, no voy a pensar en el rookie”.
Valencia su oportunidad. “Está claro que Valencia es una pista que me encanta y que voy muy rápido y podremos pelear por cosas grandes, pero aquí vengo un poco a ciegas y empezar un poco de cero”.
Los problemas físicos. “En lo físico era un poco incógnita, porque fueron muchas fracturas, fue una recuperación muy difícil y sobre todo lo que más me preocupaba era la mano del gas. Al final, si te rompes la mano izquierda, pues no la usas, pero la mano del gas y el freno al final es el 85% de o 90 del pilotaje. Así que era esa duda de sí volvería a pilotar, y si lo haría rápido, porque al final estamos en MotoGP, y no solo sirve con ir en moto, sino con dar gas pero bien”.
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