
Ducati Corse ha lanzado otra entreda de Inside Diucati Lenovo Team, donde podemos ver a Gigi Dall’Igna rendirse ante Marc Márquez
Este fin de semana en Brno ha dejado muchos aspectos a destacar. Uno de ellos es nuevamente la superioridad de Marc Márquez sobre la Ducati, algo que parece reforzarse semana tras semana. El 93 volvió a ganar la carrera sprint y la carrera del domingo, consiguiendo nuevamente 37 puntos que le separan todavía más del resto de rivales del campeonato.
En esta entrega, y como viene siendo habitual, Ducati nos enseñó desde dentro el trabajo de cada GP. En esta ocasión fue el de la República Checa, que empezaba con el sábado y la llegada al circuito de sus pilotos. Era momento de atender a la prensa, y Pecco Bagnaia se mostraba con ganas aunque cauto. Buenas sensaciones y risas dentro del equipo en una actividad entre los dos miembros del Ducati Lenovo.
Llegaba el viernes, el primer día de coger sensaciones tanto con la moto como con la pista. La lluvia era la protagonista en este primer día en la República Checa, y las sensaciones de los pilotos eran algo ya conocido: Bagnaia no terminaba de encontrarse, y Marc Márquez se quejaba desde el primer entrenamiento libre: «Pongo la segunda marcha y no tengo potencia, sin alarmas«.
Tras las sesiones del primer día tocaba el contacto con la prensa, y Marc Márquez se encontraba con Jorge Martín, que recordemos, volvía este pasado fin de semana a la competición tras su larga lesión. Entre ellos surgió una conversación: «He intentado seguirte y casi me caigo«, dijo Martín. «Sí, ahí iba muy rápido«, reconoció el de Ducati, aunque también admitió: «De delante no tenemos mucho feeling«.
Llegaba el sábado, y con él la sesión de clasificación y posteriormente la carrera sprint. Marc Márquez sufrió una caída en la última vuelta de la sesión de clasificación y tuvo que conformarse con salir segundo en parrilla. Algo anecdótico que dejó el fin de semana fue el cómo Marc llegó al parque cerrado: los padres de Bagnaia le llevaron en la scooter. Buenas sensaciones para Bagnaia, que conseguía la pole position.
«Cuando he llegado al punto de frenada he visto humo, me he despistado por un momento y ya me había ido largo», explicaba Marc Márquez en el parque cerrado. Desde Ducati se mostraban felices por haber conseguido ser primero y segundo en la parrilla.
Carrera sprint: sabor agridulce para Ducati
La carrera sprint fue una auténtica locura: presiones de los neumáticos, posibles sanciones, pilotos dejando pasar a otros… Desde Ducati, aseguraron haber calculado bien las presiones de los neumáticos, pero la lucha en las primeras vueltas de la carrera le dieron la vuelta a lo planeado. Pecco Bagnaia comenzó a irse hacia atrás, y Marc Márquez, mientras dominaba, tuvo que dejar pasar a Pedro Acosta para no ser sancionado y así estabilizar esa presión.
«La cosa es que básicamente eso es tirar la carrera, porque vi el mensaje en el dashboard y tuve que aflojar«, se lamentaba el italiano. Desde Ducati explicaban lo sucedido: «Tuvimos un problema electrónico en parrilla que arreglamos justo a tiempo, pero eso generó otro fallo, un mensaje erróneo. Para Pecco fue confuso, imposible de gestionar» decía Gabriele Conti, ingeniero.
El domingo la carrera fue un poco más estable para ambos pilotos, pero volvió a dividir el box: Marc Márquez terminó primero mientras que Pecco Bagnaia fue cuarto: «He sufrido mucho durante toda la carrera» afirmaba el italiano a su mecánico. Mientras tanto, Marc Márquez celebraba diciendo que saldría de fiesta antes del parón veraniego, pero que nada más terminen estas cuatro semanas, volvería a la faena.
Por otro lado, la imagen del fin de semana la deja Gigi Dall’Igna. El técnico italiano se fundió en un abrazo con el 93 tras la victoria, dejando ver el resto que ambos tienen hacia el otro: «Ya lo sabía, pero ahora entiendo mucho mejor por qué nos costaba tanto ganar campeonatos«, le dijo Dall’Igna a Márquez.
Y esta frase no se debe más que al dominio y la gran superioridad que Marc Márquez está mostrando durante toda la temporada. El piloto lidera a estas alturas con 120 puntos de diferencia respecto a su hermano Alex. ¿Puede esa frase de Dall’Igna referirse a la época de Marc en Honda, donde absolutamente nadie podía plantarle cara? Ahora ya sabe por qué no ganaban… y es por el indudable talento del 93.
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