Marc Márquez ha vuelto a subirse a su Honda nueve meses después de su caída en Jerez. El catalán ha ofrecido una entrevista a ‘AS’ donde ha expresado como ha sido su reestreno y como comparte box con su nuevo compañero de equipo.
El Gran Premio de Portimao estuvo marcado sin duda por la vuelta de Marc Márquez a la competición. Después de nueve meses de miedos, incertidumbre y esperas el catalán volvía a sentirse de nuevo piloto y sin duda, lo ha hecho a lo grande. Sus lágrimas al llegar al box y el aplauso de los que todo este tiempo le han estado esperando marcaba un fin de semana especial para el box del ’93’. Este fin de semana, Marc Márquez ha conseguido la que probablemente ha sido la victoria más importante de su carrera deportiva, volver a sentirse un piloto de carreras.
Su brazo tras Portimao. “Está magullado del fin de semana, pero era un poquito lo previsto. Ayer descansé, hoy también descanso y mañana también descansaré, porque así lo pactamos con los doctores. La progresión del estrés al hueso y al brazo tiene que ser pasito a pasito y ya asimilando todo lo que ha sido el fin de semana, tanto emocional como físico y, si te digo la verdad, ya estoy pensando en Jerez, dando vueltas al circuito“.
Una vuelta esperada
La caída de su compañero de equipo. “Le he dicho que tuvo suerte en la caída, como también mi hermano. Fueron dos caídas feas, pero en la suya, entrando a meta, tuvo suerte y ahora más que nunca necesitamos el Repsol Honda Team al completo y todas las Honda rodando para ir mejorando el nivel de la moto y de los pilotos para llevarla a lo más alto“.
Un fin de semana accidentado. “En el FP3 no pasé miedo, porque nunca he pasado miedo durante el fin de semana, pero sí que cuando ves la caída de Martín y, cuando empecé mi vuelta rápida, la volada de mi hermano delante de mí en la curva 3, pues dije “acabo la vuelta, acabo el entreno”. Además, las sensaciones tampoco eran buenas y por la tarde ya habría otros 45 minutos de entrenamiento”.
El único en ganar con Honda. “Es una moto que conozco desde 2013. Era una moto ya hecha y se ha ido evolucionando, aunque este fin de semana en Portugal no empecé con mi base, porque en este tipo no tenía ningún tipo de referencia al no haber rodado nunca con ella allí. Empecé con la moto que estaba pilotando Stefan Bradl. En el FP4 puse la puesta a punto que estaban utilizando Pol y Álex, que es la que me dijeron los técnicos de Honda que estaba funcionando mejor este año. Ahora hay que adaptarla a mi estilo, porque en un año llegan cosas nuevas y hay que probarlo todo“.
Sus objetivos
Su madre. “Mi madre me echó la bronca, no por lo que había hecho durante el fin de semana sino por lo que había llorado ella el domingo desde casa. El alivio éste ya está y creo que Jerez será un fin de semana más normal, a nivel de emociones, y esto me hará trabajar más relajado.. De momento tengo una limitación y no puedo hacer la carrera entera al cien por cien. Es ahí donde tenemos que trabajar, pero entre carrera y carrera debo respetar los descansos. Veremos. El objetivo es encontrarse mejor y estar un poco más cerca del primero, pero soy consciente de que en cada circuito me encontraré una película diferente. Me gustaría responderte “esto”, pero mi físico y la evolución de mi brazo es la que marcará lo que queda de año”.
Luchar por el título. “Respecto al título, quedan muchas carreras y si es un campeonato como el del año pasado, con altibajos, ya se vio que puede pasar de todo. Pero hoy no puedo pensar en el título porque no estoy preparado para luchar por el título. Ojalá lo esté lo antes posible, porque es uno de mis objetivos el luchar por carreras lo antes posible”.
Rivalidad con su compañero de equipo. “Te digo una cosa: ¡Ojalá haya tensión sana de aquí a final de año! Esto querrá decir que estamos luchando por posiciones delanteras“.
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