Marc Márquez busca mejorar su rendimiento en MotoGP.
Marc Márquez tiene claro su objetivo: volver a ser Campeón del Mundo. Para ello, el piloto de Ducati está preparándose a conciencia, tanto a nivel físico como mental. Sus resultados de esta temporada están dejando claro que la lesión de su brazo es cosa del pasado; aunque Márquez prefiere no detenerse ahí. El piloto ha visitado junto a su hermano Alex y su entrenador las instalaciones de Technogym; donde el fitness se une con la tecnología para ayudar a los deportistas de élite a alcanzar su mayor rendimiento.
El de Cervera ha podido probar diferentes máquinas, que más adelante le acompañarán en su propio gimnasio ‘doméstico’. A su llegada al ‘Technogym Village’, Márquez ya dejaba claras sus intenciones. «Apuntas a lo mejor. Porque amas tu trabajo y te quieres esforzar por buscar lo que te puede ayudar más para después dar el cien por cien en la moto», contaba.
Como deportista de élite, y desde sus inicios en el motociclismo, el gimnasio ha sido una parte fundamental de la vida del ocho veces Campeón del Mundo. «Empecé a ir al gimnasio cuando tenía doce años más o menos. A los diez, doce años, empiezas con algo muy ligero. Poco a poco, empiezas a entender que es tu trabajo, que el gimnasio forma parte de tu vida. Al principio me entrenaba, me acuerdo, en un gimnasio pequeño de mi pueblo», recordaba. «Después hice un pequeño pequeño gimnasio en el garaje de casa de mi padre o de mi madre. Me entranaba con mi hermano. Después ya, lo hice en mi casa».
El entrenamiento en el gimnasio se ha convertido en una parte esencial de la vida del piloto. «Por semana hago en el gimnasio, mínimo, tres días. Después hacemos bicicleta, todo el cardio que necesitamos, y la moto. Pero mínimo tres días; si puedo cuatro, cuatro. Pero, sinceramente, es mi entrenador el que me para; porque es como un estilo de vida. Si no hago la horita de gimnasio no estoy contento«, apuntaba.
«Mi primer sueño era ser piloto, después mecánico»
La clave para un buen entrenamiento, para Márquez, no es qué haces sino cómo lo haces. «La performance es sobre todo entender lo que estás haciendo. Porque una vez lo haces, piensas que lo estás haciendo bien y estás haciendo lo contrario de lo que quieres buscar», contaba. «Mi primer sueño era ser piloto, después mecánico. Pero sí, todo lo que era el deporte, desde pequeño. A las ocho de la mañana salía de casa con la bici, y volvía a las dos para comer», ha recordado.
«Con mi hermano, me siento una persona muy afortunada. Porque puedo elegir lo que me gusta y, a la vez que me está sirviendo de entrenamiento para la moto, lo hago con mi hermano; que al final se convierte en mi compañero de entrenamiento. Me gusta mucho la bicicleta, pero también debo entender qué me sirve para mi deporte. Así que siempre hacemos dos o tres horas. Porque sí, se puede hacer más. Pero para nuestro deporte es el entrenador quien te guía un poco», explicaba.
Márquez recordaba también que, el momento de su lesión, le hizo entender cómo podía añadir la tecnología a su entrenamiento de cara a recuperarse. «Cuando tuve la lesión, desde ahí, honestamente, empecé a entender el ‘tecno’. Porque hasta ahí yo entendía solo el ‘gym’. Y después entendí que no era así y desde ahí empezó a entrar en mi cabeza el punto ‘tecno’. Porque al final esa tecnología, todo lo que te puede ayudar, toda esa información que te ayuda, en este caso, al brazo, me ha ayudado muchísimo. Aún hoy estoy trabajando mucho más de lo que hacía cuando ganaba; pero para volver a ganar, ayudado por esa tecnología», finalizaba.
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