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Martín recuerda su peor momento en Moto3: «Para haberme matado»

15 Dic. 23 | 14:30
Jorge Martín Gresini 2018 Moto3 MotoGP
Foto: Gresini Racing

‘Martinator’ es como se llama el documental de Jorge Martín en DAZN, donde cuenta claves de su carrera deportiva.

Las lesiones han estado muy presentes en la trayectoria de Jorge Martín, tanto es así que nada más subir al Mundial de Moto3 sufrió mucho. No sólo eso, sino que cuando se jugaba el título en 2018 también tuvo que pasar por momentos duros para acabar coronándose. Por su parte, el madrileño cuenta también que antes del Mundial ya se había roto varios huesos por desgracia, llegando su familia a pensar que era algún tipo de enfermedad que le hiciera romperse fácilmente.

«Yo desde muy pequeño he tenido lesiones, incluso antes de llegar al Mundial ya me rompí dos veces la clavícula, me había roto 4 veces los brazos… Lo he sufrido pero no me lastraba, no pensaba ‘no voy a ir más rápido porque me voy a caer’. Daba lo mejor de mí y ya está», comenzó a hablar Martín de su entrada al campeonato y sobre todo de que es un piloto propenso a lesionarse.

La muerte de Fausto Gresini fue un golpe duro para Jorge y su familia, pues fue con quien ganó el título de Moto3. «2018 tengo historias para regalar. En Brno me rompí el radio, perdí esa carrera corriendo a operarme y al fin de semana siguiente en el podio. Pero sí, creo que fue más difícil aún la del guante», confirmó.

«En Brno me rompí el radio, perdí esa carrera corriendo a operarme y al fin de semana siguiente en el podio»

«Yo estaba en la clínica tratándome justo esa lesión de radio y me hicieron más presión de la cuenta en un punto en concreto y cuando me soltaron dije: ‘Oye, no puedo abrir la mano’. Vi la cara de susto de todos y dije ‘esto es gordo’. Me pusieron hielo, que quizás no fue tampoco la mejor solución, lo tenía súper inflamado y nada, no tenía manera», añadía Martín.

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«Empezamos a hacer vendajes pero los vendajes pierden fuerza y en Moto3 tampoco vas tan rápido pero los 250 km/h que se pillan en Tailandia, en cuanto intentaba coger el embrague se me iba la mano. Para haberme matado», contaba detenidamente el de San Sebastián de los Reyes. Pero a su padre se le ocurrió la que fue la mejor solución: un guante especial para que su hijo Jorge pudiera competir sin correr demasiado peligro.

Jorge Martín Gresini 2018 Moto3 MotoGP
Foto: Gresini

Fue un momento sin duda para enmarcar, ya que el invento de su padre funcionó. «El guante me abría la mano sola y yo cerraba, que yo si que podía cerrar, el problema era al abrir. Entonces ya salí al ‘warm up’ con él, me encontré bien, y luego la carrera la recuerdo como un martirio porque no sé por qué ese año mi moto no corría.

«Un fin de semana que pintaba muy mal fue un poco la salvación de ese Mundial»

«El esfuerzo de la mano en las últimas 3 vueltas no era casi consciente de la situación. En la última vuelta se caen Bastianini y Bezzecchi, y ahí vi la luz. Al final acabé cuarto, fue increíble viniendo de tan atrás», contaba Martín. «Conseguí incluso sacar ventaja en el campeonato. Al final un fin de semana que pintaba muy mal fue un poco la salvación de ese Mundial. Diría que ahí fue la clave de ganar ese Mundial».

«Recuerdo que fue una carrera complicada porque la pista estaba medio mojada hasta el final que se secó», contaba de cuando ganó el campeonato de Moto3. «Yo estuve ahí en el grupo, tuve varios toques con Marco [Bezzecchi]. En las últimas 3 vueltas que además vi que Marco estaba retrasado en la tele apreté con todo, gané, pasé la tele y vi que él había hecho quinto y ahí ya me derrumbé».En ese momento todo eran lágrimas de euforia y abrazos, pues se había coronado como campeón de Moto3.

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