Masini, jefe del equipo Gresini, destaca el crecimiento de Álex Márquez desde su llegada a MotoGP y su conexión total con la GP24.
En una entrevista en exclusiva con Crash.net, el director del equipo Gresini, Michele Masini, destaca la transformación de Álex Márquez, quien hace apenas dos años luchaba por mantenerse en MotoGP y ahora pelea se encuentra en plena pelea por el campeonato. Tras un difícil paso por Honda, su llegada a Gresini en 2023 revitalizó su carrera, logrando podios y victorias. Aunque la temporada pasada se vio limitado por la GP23, el salto a la GP24 ha marcado un punto de inflexión.
El técnico de Gresini Racing, explica que, aunque Álex Márquez logró progresos con la Ducati GP23 durante la temporada pasada, nunca llegó a sentirse completamente cómodo con ella: «Tuvimos algunos problemas, no técnicos, a principios de año [2024]. La moto funcionaba muy bien, era la ganadora de Bagnaia, pero no se adaptaba muy bien al estilo de pilotaje de Álex«. La situación comenzó a mejorar cuando el equipo empezó a comparar datos con otros pilotos de Ducati, incluido su hermano Marc.
El verdadero punto de inflexión llegó con la llegada de la GP24, que el #73 probó por primera vez en los tests de Barcelona. «Fue como amor a primera vista para Álex«, señala Masini, destacando la conexión inmediata con la nueva moto. Tan bueno fue el feeling con la Desmo 24 que el único consejo que le dio Masini a Álex en los test de Tailandia, los cuales lideró, fue: «No tienes que cambiar nada, solo sigue así porque lo tienes todo en tus manos«.
Aunque la pretemporada había sido inmejorable, para nada se imaginaba todo lo que ha ido consiguiendo Márquez hasta este momento, «me di cuenta de que podíamos luchar en cada carrera por el podio«. «Tengo que decir que, en este momento, Álex es el segundo piloto más fuerte de la parrilla«, añade.
«A veces la gente no recuerda que es bicampeón del mundo«
Masini reconoce lo complicado que puede ser para Álex Márquez compartir parrilla y equipo con su hermano y luchar el mundial con él. «Es muy difícil competir en un equipo en el que, por otro lado, está Marc Márquez, aunque sea tu hermano«, admite el técnico, aludiendo a la presión añadida que supone luchar con un ocho veces campeón del mundo. Remontándose al pasado, el de Gresini destaca que todos los objetivos, en forma de títulos que Álex se ha marcado, los ha conseguido: «En Moto3 lo hizo después de un de años, en Moto2 también. Es un piloto que necesita estabilidad y confianza en el equipo, y eso le ha ayudado a alcanzar el éxito«.
Considera que ha llegado el momento de los aficionados vuelvan a valorar como se merece a Álex Márquez. «Creo que mucha gente tiene que reevaluar la carrera deportiva de Álex. A veces la gente no recuerda que es bicampeón del mundo«, afirma, en referencia a los títulos de Moto3 y Moto2. Para Masini, su talento no solo está en la pista, sino también en su actitud y compromiso fuera de ella.
Tras tres temporadas trabajando juntos, Masini destaca la calidad humana de Álex, a quien describe como un piloto inusualmente considerado con su entorno: «Siempre piensa en los demás, en los mecánicos, en el equipo, y eso es algo increíble en un piloto«. No oculta sus emociones cuando las cosas se tuercen, también valora esa transparencia emocional como una ventaja en la relación equipo-piloto. «Cuando las cosas van mal, pierde la sonrisa. Es fácil entender lo que piensa y cuándo necesitamos darle un abrazo. El límite de lo que podemos lograr juntos es muy alto«, sentencia.
¿Te SUSCRIBES GRATIS a Motosan.es en la campana 🔔? ¡SIGUE HACIA ABAJO para ver las ÚLTIMAS NOTICIAS!
