El piloto de KTM marca el mejor tiempo del viernes y demuestra que el paso adelante técnico es real.
El Gran Premio de Italia arrancó con una de las actuaciones más sólidas del año para Maverick Viñales, quien firmó el mejor tiempo del viernes en el Autódromo Internacional del Mugello. A los mandos de su Red Bull KTM Tech3, el piloto de Roses paró el crono en un espectacular 1:44.634 durante la práctica, superando por escasas milésimas a Pecco Bagnaia y a un combativo Marc Márquez. Aunque en la FP1 había sido séptimo, el catalán logró reconfirmar en condiciones más representativas el paso adelante que ya había mostrado durante el test de Aragón.
Viñales no solo fue rápido: también se mostró convencido de que está contribuyendo activamente a construir un proyecto ganador con KTM. Su viernes no fue una casualidad, sino la consecuencia de meses de trabajo técnico, ajustes clave y una mayor compenetración con la moto. Así lo ha explicado a los medios de comunicación donde nuestro colaborador Manuel Pecino estaba presente.
Sobre su rendimiento en Mugello y la evolución del proyecto. “Dando continuidad al resultado que vamos trayendo en las últimas carreras y entreno. Se ve el potencial, se ve cómo está creciendo todo el proyecto, pero se necesita tiempo. Necesita tiempo y paciencia y trabajar en el modo correcto, así que contento con el resultado de hoy. Es obvio que hemos dado un paso hacia adelante. Lo dimos en Alcañiz, en el test, pero era muy importante reconfirmarlo aquí en la FP1, con poco grip».
Sobre la mejora técnica más relevante del viernes. “Para mí, siempre un poco el hándicap que tenía con esta moto era cuando dejaba un poco el freno delantero, me costaba mucho girar. Siempre me iba un pelín largo y luego ya, pues, abría el gas en una posición que no tocaba, levantaba tarde la moto. Entonces, en ese aspecto, cuando tú dejas el freno, ahora todo es más natural. Y esto es debido a un cambio en la aerodinámica. Entonces, esa es la mejora.”
Sobre si este ritmo puede mantenerse en carrera y sprint. “Lo vamos a probar. Es obvio que la estadística nuestra con KTM, el domingo, siempre somos bastante fuertes. Entonces, hay que seguir trabajando, confiar y fluir, fluir mucho e intentar estar delante y luchar las carreras”.
Construyendo su propia arma
Sobre la consistencia y su rol dentro del proyecto. “No he estado nunca en la mejor moto. Pero ahora la estoy construyendo. Así que eso es lo que yo creo, ¿no? Lo que hay dentro de mí es… Bueno, has pilotado bien, tienes mucho nivel, ahora hay que construir todo alrededor tuyo para tener una buena arma. Así que eso es lo que estoy intentando hacer y por lo que estoy confiando y visualizando mucho, que KTM, bajo mi confianza y bajo lo que yo siento, puede ser la siguiente moto. Entonces, es lo que estoy intentando construir desde hace ya unos meses. Muchos lunes, obviamente, cuando había mucho grip, enmascaran los problemas de la moto y es más fácil. Y obviamente, como tengo velocidad y voy rápido, pues me sale una vuelta muy buena, eso está clarísimo. Pero ahora, a diferencia del pasado, tengo la oportunidad de construir algo.”
Sobre el respaldo de KTM a los cuatro pilotos oficiales. “Están por los cuatro pilotos. A los cuatro nos dan el máximo. Por lo que a mi parte se refiere, yo estoy intentando dar el máximo para que la fábrica tenga la indicación correcta y pueda mejorar lo más rápido posible para estar luchando con las Ducati en las posiciones de delante.”
Dos caminos, un mismo objetivo
Sobre si haría de mentor de Pedro Acosta en KTM. “No creo que le tenga que hacer de coach a Pedro. Pedro va rapidísimo. Estamos en etapas distintas. Es obvio que la experiencia es un grado.”
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