El piloto de Yamaha, Maverick Viñales, no sabe con cuantos motores llegará al Gran Premio de Misano. El catalán está sufriendo mucho este año con sus motores.
El inicio de temporada de Yamaha en general, y de Maverick Viñales en particular, no está siendo el que ellos habían esperado. A pesar de empezar muy fuerte en las primeras carreras, los fallos técnicos no tardaron en llegar. Tanto Viñales como Rossi han tenido que enviar uno de sus motores a Japón para revisarlo. También los pilotos del equipo Petronas han tenido problemas con sus motores y a causa de eso se están dejando puntos para el campeonato.
La última para Maverick Viñales la vimos en el Gran Premio de Estiria donde el piloto tuvo que tirarse de su moto en marcha a 220 km/h después de perder los frenos. La moto se chocó contra las vallas protectoras y salió ardiendo. Ahora, el equipo Yamaha y el piloto de Figueras no sabe si ese motor seguirá valiendo o lo han perdido después del accidente de Austria.
La realidad es que Maverick Viñales solo tiene cuatro motores, como le pasa también a Valentino Rossi y Franco Morbidelli. Sin embargo, el joven piloto de Yamaha ya ha abierto todos por lo que sus problemas se agravan aún más. Además, para intentar solucionar los problemas de los motores, Yamaha decidió rebajar las revoluciones de los propulsores, lo que hace que pierdan potencia frente a sus rivales.
A mayores, dos de los motores de Viñales tienen las piezas viejas donde han detectado que les causan problemas. De hecho, el motor de la moto que se estrelló en el Red Bull Ring era uno de los buenos. Si finalmente ese motor queda inservible, Viñales deberá disputar las nueve pruebas que queda con solo un motor válido. De momento, todo esto son hipótesis porque, hasta Misano, no lo sabrán.
Hasta Misano, Maverick Viñales no saldrá de dudas
Hasta la fecha, Yamaha no ha comunicado ningún problema en los motores. Según la dinámica de MotoGP en caso de accidentes, la moto dañada fue devuelta al box por los comisarios. Una vez allí, los ingenieros la limpiaron y la desmontaron para analizar si alguna de las piezas se ha podido dañar. En caso afirmativo, se llama al departamento de recambios de la fábrica para que envíe piezas nuevas.
Por su parte, el motor se les da a los dos ingenieros motoristas para hacer un primer examen del mismo. Además, Yamaha cuenta con una división de motores en Italia. Es por esto que hasta que no llegue Misano no se comunicará si el motor está o no perjudicado ya que hasta esta fecha no lo podrán analizar bien. En esta partida italiana es donde se fabrican las piezas de la M1.
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