Paolo Simoncelli ha hablado de los cambios que se esperan en el futuro de MotoGP.
Paolo Simoncelli ha sido una figura clave del paddock de MotoGP desde la fundación del SIC58 Squadra Corse; equipo en honor a su hijo Marco. El objetivo del equipo ha sido ayudar a las jóvenes promesas del motociclismo a crecer y alcanzar su objetivo de llegar a MotoGP. Más allá de la pista, el italiano nunca se ha mordido la lengua para dar su opinión sobre la situación del Mundial; y en sus últimas declaraciones al medio GPOne no podía ser menos.
Uno de los mayores cambios ha sido la compra de MotoGP por parte de Liberty Media; quien ya cuenta con los derechos del Mundial de Fórmula 1. Esto traerá muchas novedades, y no todas positivas. La primera de ellas ha sido dejar de contar los títulos obtenidos en las categorías pequeñas del campeonato; pasando a sumar únicamente los de la categoría reina.
«Estos estadounidenses quieren cambiarlo todo. Parece que nada de lo que hemos construido les vale. Quieren eliminar de las clasificaciones oficiales los títulos ganados en las categorías inferiores, solo cuentan los de la categoría reina. Así desaparecerían mi hijo Marco, los Gresini o los Nieto. Quieren borrar la historia y solo buscan el espectáculo. Pero entonces que hagan un circo. La solución sería sencilla: cada equipo de MotoGP debería tener un equipo en Moto3 y Moto2», aseguraba.
«Márquez corre y piensa como mi hijo, nunca se rinde y siempre lo intenta»
Por otra parte, también se mostraba crítico con las nuevas generaciones de pilotos que llegan al Mundial. «A los 18 años ya están influenciados por sus mánagers y tienen físicos de la categoría reina. Duermen y comen como un Márquez y van al gimnasio 5 días a la semana. Además, se ha aumentado la edad mínima para entrar en el Mundial debido a los accidentes mortales en el CEV, cuando bastaba con hacer parrillas menos llenas», ha contado.
Pero sin duda el gran protagonista de la temporada ha sido Marc Márquez, quien se hacía con su noveno título tras ponerse a los mandos de la Ducati GP25. «Sabía que era el más fuerte. Siempre me ha gustado, corre y piensa como mi hijo, nunca se rinde y siempre lo intenta. Si Marco no hubiera muerto, nos habríamos divertido un montón», afirmó.
La otra cara de la moneda ha sido la de Pecco Bagnaia, que fue de más a menos a lo largo del año. «Esperemos que se haya aclarado las ideas. No estaba preparado para un compañero tan fuerte. Pecco viene del grupo de Valentino [Rossi] y, a fuerza de escuchar todo lo que se dice en ese grupo, ha subestimado a su compañero. El año anterior había perdido el Mundial ganando 11 carreras. Pensó: ‘Solo tendré que caer menos’. Pero Marc es una bestia en la pista y lo ha puesto en crisis», finalizaba.
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