Carlo Pernat atiende largo y tendido a Mow Magazine en una entrevista para repasar toda la actualidad del Mundial de MotoGP. El italiano, gran conocedor del paddock de la competición, no se deja nada en el tintero y se atreve a hablar del futuro de Valentino Rossi en el campeonato.
Con el paso de los años, Carlo Pernat se ha convertido en una de las grandes voces del paddock del Mundial de MotoGP. Un personaje que destaca, sobre todo, por su sinceridad ante el gran conocimiento que tiene de la competición y los muchos años que ha estado -y sigue estando- vinculado a él como manager de diversos pilotos. El italiano concedió una entrevista a Mow Magazine donde ha podido repasar toda la actualidad de la competición, sin dejarse en su interior ninguna de sus opiniones. Aunque, eso sí, ante su extensión y la cantidad de sinceridad en sus palabras, la entrega es en dos partes. Aquí podrás leer la primera de ellas y, en esta segunda, el italiano se atreve a hablar del futuro de Valentino Rossi en la competición, así como pronosticar los cambios en la parrilla de salida de cara a 2022.
Suzuki no tendrá un equipo satélite: “Cuidado con Suzuki. El año pasado demostraron que saben mantenerse ahí, callando, para luego dar el golpe letal en el momento más oportuno y con un piloto que parece perfecto para interpretar este tipo de política. Lo vimos en Qatar con Miller y en Portimao también con Márquez, hacia quien no mostró ningún temor reverencial. Conozco a Shinichi Sahara desde hace mucho tiempo, hemos trabajado juntos, y sé perfectamente el método, la preparación y las ganas de trabajar que puede transmitir. No tienen la moto más rápida y eso es un hecho, pero al final siempre están ahí. Además, las jerarquías en el box están ya bien definidas, ya que Rins prácticamente se suicidó en Portimao, y quien piense que este año Suzuki estará fuera de juego está definitivamente equivocado”.
“Veo mucho más difícil la posibilidad de un segundo equipo. Es cierto que llevan tiempo hablando de ello, pero la marcha de Davide Brivio ha aparcado el proyecto, al menos en mi opinión. Una cosa es dirigir un equipo y otra dirigirlo mientras se intenta montar otra estructura. Este es un trabajo que sólo Brivio podría hacer, pero Davide no está aquí ahora”.
Quartararo, ¿la estrella de Yamaha?: “En Portimao, antes del gran premio, me encontré con Fabio Quartararo y lo vi realmente diferente. Siempre sonriente, soleado como siempre, pero con una determinación en los ojos que no tenía el año pasado. Luego hizo la carrera que hizo. Debo admitir que siempre he sido escéptico, no sobre su talento, sino sobre su cabeza, entendida como la capacidad de luchar por un campeonato mundial. Pero tengo la sensación de que este año está muy bien. Eso es bueno para Yamaha, aunque me temo que Viñales pueda sufrir especialmente la competitividad del francés. Es cierto que Maverick sufrió una injusticia en Portimao, pero también es cierto que tiende a alterarse demasiado: si una cosa sale mal, compromete todo el gran premio”.
Yamaha se olvida de Morbidelli: “Pero lo que no entiendo de Yamaha es cómo se puede “abandonar” así a un subcampeón del mundo. Si Morbidelli ya hubiera empezado a mirar a su alrededor no me extrañaría: ¿realmente queremos creer que dos gigantes como Yamaha y Petronas no han encontrado la fuerza económica para darle a Franco la misma M1 que a los demás? ¿Y entonces estamos seguros de que los otros tres son realmente idénticos entre sí?”.
Rossi, ¿su último año?: “En cuanto a Valentino, por último, ya he expresado mi opinión: quizá haya llegado realmente el momento. Lo digo con el inmenso afecto y agradecimiento que le debemos yo y todos los que vivimos el motociclismo. Después de Jerez y Le Mans llegaremos a Mugello, allí, delante de su gente, pasará algo, pero lo mío es una sensación. No creo que se haya vuelto lento de repente, pero obviamente hay un cambio en la forma de pilotar en MotoGP al que no es fácil acostumbrarse a los 42 años. Significa tener que cambiar todo. Pero si lo consigue, seré el primero en admitir que estaba equivocado, y así lo espero, también porque esta situación corre el riesgo de arruinar la relación con Yamaha, que parecía indisoluble”.
Jack Miller, un debut poco soñado y un compañero muy fuerte: “Hace unos días escuché un análisis de Marco Melandri que compartí plenamente. Dijo que Jack Miller pudo haberse dejado llevar por la idea de que era la primera opción de Ducati, emocionándose durante los test de Qatar y acabando por pensar que sería fácil. Sin embargo, tres carreras le han demostrado que nada en el motociclismo es fácil. Pero ya es demasiado tarde, porque la referencia es Pecco Bagnaia: tiene un feeling increíble con la Desmosedici, se ve que puede hacer las cosas mejor que otros con esa moto”.
“El hecho de que Pecco sea el único que tiene un contrato de dos años con Ducati, porque todos los demás tienen un año más la opción del siguiente, me hace pensar que la jerarquía en Borgo Panigale ya estaba establecida desde hace tiempo. Y probablemente tengan razón: Bagnaia ha sido campeón del mundo, es un gran piloto y si no comete errores podrá cultivar importantes ambiciones. Como italiano no quiero ni decirlo, pero en mi opinión sí que puede hacerlo y sería lo mejor”.
Pramac Ducati: “Ya lo hemos dicho sobre Martin: es un gran talento, pero tiene que respetar a la bestia que es la Desmosedici, no intentar domarla. Johann Zarco, por ejemplo, parecía haberlo entendido, pero el domingo cometió ese terrible error. De todas formas, en general, Ducati está trabajando muy bien de cara al futuro y si el matrimonio con el equipo Gresini sale adelante podrán contar con Fabio Di Giannantonio el año que viene, aunque sea a costa de alguno de los otros cinco pilotos a los que sólo les queda un año de contrato”.
Aprilia, de test con Dovizioso: “Cuando hablo de Aprilia nunca estoy lúcido: es una buena parte de mi historia en el automovilismo y me gustaría que las motos de Noale estuvieran siempre delante. Este año parece que el giro se ha producido de verdad, la RS-GP21 está por fin a la altura de las demás, pero se han cometido grandes errores. No tienen un equipo de pruebas y eso es bastante grave si quieres aprovechar al máximo las concesiones. Pero están haciendo un buen trabajo con Dovizioso, le están cortejando sin exagerar y sin hacerle sentir presionado, y francamente me gustaría que Andrea levantara cualquier reserva y les ayudara. No sólo para preparar la moto que podría llevar en 2022, sino también para la de este año, a través de pruebas y unos cuantos wildcard, ya que podría llevar hasta seis. Si les ayuda, puede que incluso consiga algunos podios”.
“El año que viene, sin embargo, Aprilia será un equipo de fábrica en toda regla y, al menos según la información que tengo, el equipo Gresini no será un equipo satélite con sus motos. Dado que Aleix Espargarò tendrá su contrato renovado, con Aleix y Dovi sería un equipo bastante antiguo, por lo que creo que no es tan descabellado que puedan intentar un equipo satélite. Y aquí podríamos abrir un discurso muy largo, y que probablemente ya ha sido iniciado en gran secreto por las partes implicadas, sobre Valentino Rossi o, mejor, sobre VR46. Los escenarios de comercialización que se abrirían justificarían la escala de una gran operación. Pero esto, como he dicho, es un tema aparte que hay que hacer con calma y sin divagar. Pero le haré una pregunta: si usted fuera el Grupo Piaggio, ¿no pensaría en la posibilidad de utilizar la marca VR46?”.
Movimientos que podría haber en 2022: “Con el visto bueno de Aprilia para convertirse en un equipo de fábrica de pleno derecho, el año que viene tendremos dos motos más en la parrilla: 24 en lugar de 22. Honda y Lucio Cecchinello, así como KTM y Tech3 ya han hecho saber que seguirán juntos, pero estoy seguro de que los pilotos cambiarán empezando por Gardner que ocupará el lugar de Lecuona. De todos modos, tanto los japoneses como los austriacos no están interesados en un equipo adicional, salvo que se produzca algún giro sensacional. Suzuki debería haber redoblado sus esfuerzos, parecía hecho, pero el adiós de Davide Brivio probablemente dejará las cosas como están, con Mir y Rins todavía compartiendo el único box”.
“Uno de los nudos, de momento, es el que existe entre Yamaha y Petronas, pero tengo entendido que las negociaciones están muy avanzadas y que definitivamente podrían darse la mano en los próximos días, aunque el trato reservado a Morbidelli por parte de la casa Iwata y la imposición de Rossi han creado un poco de dolor de cabeza. Así que Ducati debería continuar con seis motos, y la impresión es que además del equipo de fábrica y el Team Pramac, también podría estar el Team Gresini. Quedan dos casillas por rellenar, las del eventual equipo de Valentino Rossi, que, sin embargo no es tan obvio que vaya a suceder”.
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