Pol Espargaró ha comenzado el Gran Premio de Alemania con dos caídas. Una de ella, la más dura, se ha saldado con un fuerte golpe en las costillas que ha provocado al piloto fuertes dolores en la zona.
Pol Espargaró no ha tenido el mejor de los reencuentros con Sachsenring. El piloto del Repsol Honda se ha ido al suelo en dos ocasiones durante los entrenamientos libres. La segunda de esas caídas ha sido especialmente dura, aunque no tiene nada fracturado. Está claro que el piloto de Granollers no está atravesando su mejor época en MotoGP y estas constantes caídas demuestran que no tiene buenas sensaciones con su moto. Espargaró ha concluido el primer día de entrenamientos libres del Gran Premio de Alemania en 14º posición, a siete décimas del más rápido.
Al finalizar la jornada, el piloto de Honda ha atendido a los micrófonos de DAZN y ha comenzado explicando sus caídas. “La primera caída hemos entendido que he frenado muy al límite. Era el inicio del entreno y aún guardas un poquito de margen, pero había habido un par de caídas antes y entiendo que la pista en ese momento y en ese sitio estaría un poquito sucia. He querido apretar un poquito más de lo que debería y he perdido el tren delantero, una caída normal“, ha explicado Espargaró.
Sin embargo, para la segunda de las caídas, la más fuerte, no tiene explicación. “La segunda ha sido la más dura, tenía que salir con neumáticos nuevos porque la otra moto estaba aún volviendo al box. Tenía que utilizar un neumático precalentado, duro, de otro fin de semana, vete a saber de cuándo. Lo hemos montado para hacer tres vueltas de reglamento para descartarlo y no volverlo a tener otro fin de semana porque el performance de estos neumáticos siempre es bastante bajo y ha sido bastante bajo. Iba bastante lento, la verdad, no estaba apretando mucho”.
Ha sido entonces cuando el piloto se ha ido al suelo, golpeándose con fuerza en la zona de las costillas. “La vuelta anterior ya había rodado un segundo más lento y sólo quería dar estas tres vueltas para poder entrar al box y terminar la sesión. Pero he salido volando, sin entender muy bien el porqué. La realidad es que no estaba preparado para esa acción y me he golpeado las costillas bastante fuerte. Me cuesta un poquito respirar. Entiendo que tengo las costillas inflamadas y cuando respiro, me presiona el pulmón y es bastante doloroso. Entiendo que mañana ya con antiinflamatorios estaré mejor“, asegura.
Espargaró prefiere no sacar conclusiones del día de hoy. Pero reconoce que quedarse fuera de la Q2 por pocas décimas les da pistas sobre los puntos a mejorar en su moto. “A pesar de las condiciones, es difícil de probar en estas circunstancias porque no he sido rápido. Me he quedado fuera de la Q2 por dos o tres décimas, muy poquito. Pero igualmente son estas tres décimas las que te dan las señales de dónde tienes que mejorar y qué es lo que tienes que hacer para ir más rápido. A tres décimas del tiempo no me atrevo a sacar conclusiones para bien o para mal. Mañana volveremos a empezar a ver si estoy mejor y puedo trabajar un poquito más con la moto y solucionar los problemas que tenemos porque hoy no quiero sacar conclusiones”.
Con respecto a su moto, el piloto reconoce que han hecho mejoras. Sin embargo, el resto de equipos de la parrilla han mejorado mucho más, lo que los pone en una situación complicada. “Es mucho más distinta de lo que era la Honda del año pasado. Hoy Taka ha rodado en 20.6, yo en 20.8, un par de décimas más lento. Y eso ha sido mucho más rápido que el más rápido del FP2 del año pasado que fui yo con 21.1 de cualquier Honda. De 21.1 a 20.6 van cinco décimas, así que la moto es mucho más rápida que el año pasado”, afirma el piloto. “El problema es que nosotros hemos mejorado cinco décimas, pero los otros han mejorado más de un segundo, así que es complicado. Todo el mundo mejora y todo el mundo va muy rápido y nosotros estamos más rápidos, pero no tanto”.
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