
El piloto catalán pasó por Carrusel Deportivo tras terminar el GP de Qatar y explicó que para ser Campeón del Mundo no es vital ganar carreras.
Pol Espargaró fue uno de los claros protagonistas en el primer Gran Premio de la temporada en Qatar. El piloto de Honda consiguió un meritorio tercer puesto; eso sí, tras liderar la carrera durante gran parte. La estrategia, dice él mismo, no era la que ejecutó. Al principio se vio tan rápido que apostó por forzar y marcar unos tiempos muy rápidos. Sacó mucha ventaja a sus perseguidores, pero en el momento que los neumáticos dijeron basta, Bastinini y Binder se aprovecharon. No obstante, Espargaró reconoce que el trabajo realizado en Losail fue exquisito y que Honda está demostrando el claro potencial que tiene. El objetivo para él es claro: ganar el Mundial de MotoGP.
El resumen de la carrera es claro: un ritmo inesperado y un golpe de efecto. «La carrera deja un cúmulo de sensaciones. Terminar en el podio en el primer Gran Premio de la temporada es siempre importante, es algo grande. Aunque la estrategia que finalmente he hecho era completamente opuesta y errónea a la que teníamos en mente. He sido muy rápido al inicio, pero al final lo he pagado. Los neumáticos se han ido abajo y ahí Enea ha sido más rápido que yo. Además, luego he cometido un error y Binder también lo ha aprovechado».
Lo que está claro es que Honda ha dado un paso adelante. Eso lo corrobora el resultado final de Pol y las buenas sensaciones que dejó tanto él como Marc Márquez. En ese sentido, Pol reconoce que del GP de Qatar se queda con, precisamente, eso. «El mensaje que damos desde Honda es que la moto es rápida con dos pilotos, no solo con uno. A la larga es importante para el equipo y para la fabrica».
La próxima parada ya es en semana y media. Pol Espargaró vuelve a Indonesia, donde en pretemporada fue bastante rápido. Sin embargo, el piloto de Honda no se marca el objetivo de ganar. Sabe que la temporada es muy larga y el piloto más regular será el que tenga más opciones de levantar el título final. «No me preocupa ganar, me preocupa ser regular y estar siempre entre los tres primeros cada fin de semana. Mir no consiguió muchas victorias. Quiero ser campeón del mundo, y si eso pasa por no ganar ninguna, me valdrá igual«.
Por último, reconoce la tremenda igualdad que hay esta temporada en el paddock de MotoGP. «La categoría está rápida. En Qatar se ha rodado muy rápido. Han llegado muchos pilotos jóvenes, con un talento importante y encima es el año donde más Campeones del Mundo hay en la categoría. Es más, parezco un abuelo de 30 años compitiendo con tantos jóvenes».
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