Pol Espargaró ha analizado ante los micrófonos de DAZN la situación de Honda y el papel que él pueda jugar en estos meses. El español, que correrá para GasGas el año que viene, sabe que su opinión queda cada vez más reducida.
El cielo parece despejarse para Honda con la silueta en el horizonte de un Marc Márquez que sigue dando grandes pasos en su recuperación. El equipo ha confirmado que el ocho veces campeón del mundo será de la partida para los test de Misano de la próxima semana. En ellos, la marca del ala dorada volcará todos sus esfuerzos en dar los primeros pasos para una Honda de 2023 competitiva.
«Básicamente Marc viene al test porque, entiendo, que Honda va a traer la moto nueva o el prototipo de moto nueva que está pensando para el año que viene. Es importante el ‘input’ de Marc y de los pilotos que se van a quedar como Stefan Bradl o Takaaki Nakagami para ver cómo funciona la moto el año que viene«, declaraba un Pol sabedor de la necesidad de Honda de hacer unos test productivos.
«Es un test muy crucial para todas las fábricas que quieran utilizar un prototipo nuevo, hacer un cambio bastante grande en sus motos. Honda es la fábrica que tiene que hacer un cambio más grande, por lo que para no meter la pata es importante que Marc esté aquí«, añadía Espargaró. Para Honda, la participación de Márquez la semana que viene es crucial para poder desarrollar la moto del 2023. «Por eso yo creo que Marc está intentando empujar«, agregaba el nuevo piloto de KTM.
«Yo probablemente no voy a tener la oportunidad de probar la moto nueva»
Por otra parte, Pol hace un alarde de profesionalidad y no duda en reconocer que él está a disposición de los japoneses hasta que su contrato llegue a su final tras el Gran Premio de Valencia. «Yo me debo a la fábrica hasta Valencia, así que me pueden utilizar para probar lo que quieran, sea en la moto que estamos probando ahora o en la moto futura«, comentaba el de Granollers.
«Yo, probablemente, o al 90%, no voy a tener la oportunidad de probar la moto nueva, así que en eso no voy a poder ayudar mucho, pero espero que funcione y sea un éxito«, exponía Pol que, además, añadía: «Me gustaría probar la nueva moto y así se lo he dicho a la fábrica. Soy un trabajador de Honda y voy a estar a su disposición para lo que ellos necesiten«.
Por último, Espargaró ha dejado su opinión sobre el método de trabajo de la marca japonesa. «Los japoneses tienen una manera de trabajar, un poquito, a la vieja usanza, de intentar mantener todo muy en secreto y que los pilotos no prueben nada a pesar de que el año que viene la moto con la que voy a ir el chasis es de tubos y es muy distinta«. Desde que Márquez comentase en rueda de prensa en Austria que es un aspecto a cambiar, esta filosofía de trabajo ha quedado puesta en tela de juicio. «Es su decisión, su filosofía y no me puedo enfadar«, finalizaba Pol Espargaró.
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