
Fabio Quartararo llega a la octava carrera de la temporada a tan solo dos puntos del líder del mundial. El francés aterriza este fin de semana en un circuito que le deja muy buenos recuerdos.
Fabio Quartararo parecía el gran favorito de esta temporada, así lo demostró en las dos primeras carreras en Jerez donde ganó con una autoridad absoluta. Sin embargo, a partir de Brno los problemas se convirtieron en su gran aliado hasta que en Misano perdió el liderato del mundial. En Misano, un trazado donde Yamaha se ha impuesto con las victorias de Viñales y Morbidelli, Quartararo ha vuelto a sufrir de la mala suerte. En la primera manga, el francés se fue al suelo cuando se encontraba en posición de podio y en la segunda no fue capaz de adelantar a Espargaró y cuando lo hizo fue sancionado por pisar el verde.
La asignatura pendiente de Yamaha
Lo cierto es que la potencia sigue siendo una de las asignaturas pendientes para los de Iwata. La velocidad punta es casi inexistente lo que acaba lastrando en este punto a sus pilotos hasta el punto de que adelantar se ha convertido en uno de los máximos problemas de Yamaha. «Estamos sufriendo mucho para adelantar a la gente, y si no lo haces como Maverick (lideró la carrera desde el principio) es difícil ganar una carrera. Gané mis dos carreras así, como Franco, como Maverick. Así que, cuando estás detrás de alguien que tiene mucho más motor que tú, no puedes hacerlo mejor».
Preguntado por la opinión de su compañero, Viñales respaldó la versión de ‘El Diablo’ y señaló a la velocidad punta como el principal problema de Yamaha: «Estoy bastante de acuerdo, honestamente. Vas detrás de unos cuantos pilotos y aunque seas un poco más rápido no puedes adelantar, lo único que haces es calentar los frenos y es difícil controlar también la presión de los neumáticos».
Una nueva oportunidad este fin de semana
Este fin de semana el mundial aterriza en Barcelona, un trazado que trae muy buenos recuerdos para ‘El Diablo’, allí consiguió su primera victoria en Moto2 y su primer podio el año pasado en MotoGP, algo que este año ve complicado repetir. «Veamos para Barcelona, es una pista que me encanta pero tiene una recta de un kilómetro, así que no sé qué pensar. Pero es una pista en la que tengo muchas ganas de estar, porque creo que es un trazado donde podemos conseguir algo realmente bueno».