La carrera deportiva de Andrea Iannone está actualmente cogida con pinzas tras conocerse que está provisionalmente suspendido por un positivo en una prueba anti-doping en el pasado GP de Sepang.
Todas las alarmas han saltado desde que ayer se supo la noticia que relacionaba a Iannone con un posible dopaje en el GP de Sepang. El piloto podría ser suspendido de forma permanente –ahora mismo es provisional-. Si esto pasara, dejaría libre un asiento en el equipo de Aprilia. Esto significaría abrir de nuevo la veda de quién ocuparía esa plaza de la marca italiana en MotoGP. Pero Andrea tiene oportunidad de hacer un contraanálisis en el que se asegure que no hay ningún problema y levantarle la suspensión.
Si el italiano quiere reclamar la suspensión, tendría que ir a la Corte Disciplinaria Internacional presentando un escrito antes de que se acaben los 15 primeros días desde que al piloto le comunicaron el positivo en la prueba anti-doping, aunque él ya dijo públicamente que no ha recibido nada todavía. También puede recurrir al Tribunal Administrativo Deportivo para que se juegue a su favor.
Duración de proceso y penalización
Por otro lado, si todo resulta en contra de Andrea Iannone, si la penalización es internacional sería de 4 años sin competir. Si no lo es, sería reducida a 2 años. Dentro de lo malo también estaría el proceso en sí, ya que puede durar meses y queda apenas mes y medio para que los pilotos de MotoGP se dirijan a Sepang para los terceros test oficiales de pretemporada, y no podría estar presente si todavía está suspendido provisionalmente.
Desde Aprilia Racing están entre la espada y la pared, pues podrían perder a Iannone, que ha dado algunos pasos adelante durante la temporada 2019. Aunque todavía no se pueda saber si está oficialmente suspendido, tendrían que buscar un piloto que coja su moto libre para poder seguir adelante con el desarrollo de la moto y las pruebas para preparar el 2020.
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