Raúl Fernández llega a Aragón con la esperanza de recuperar sensaciones: “Lo único que me falta con esta moto es recuperar el ‘feeling’ que tenía con la anterior”.
Raúl Fernández se vio obligado a abandonar la carrera del domingo en Austria debido a un fallo mecánico en las últimas vueltas. A pesar del contratiempo, destacó un pequeño avance en sus sensaciones con la Aprilia y describió su carrera como una de “aprendizaje”. En “uno de mis circuitos favoritos”, Raúl se ha propuesto seguir progresando antes del test de Misano, una cita clave para mejorar y volver a competir con Ducati.
Desde el circuito de Aragón, nuestro colaborador Manuel Pecino recoge sus primeras declaraciones: “Tenemos que poner los pies en el suelo. Creo que ha habido mucha autopresión, sobre todo por mi parte, y creo que es momento de entender las cosas. Las primeras personas que me han transmitido esa calma han sido todo el equipo, desde Justin, Davide hasta todo mi entorno de mecánicos, que piden ese tiempo. Nuestro objetivo vuelve a ser el año que viene, no este; hay que prepararse para el futuro“.
“Es uno de mis circuitos favoritos, pero no podemos crear ninguna expectativa”
“Ahí es cuando entra esa calma y, sobre todo, no hay que cometer errores, porque en estas dos carreras hemos estado cambiando mucho la moto sin llegar a entenderla, y creo que ha sido un error. Venía con una muy buena base de la moto 23 y, en ese momento, quisimos poner y copiar todo. Es una moto muy diferente con la que he empezado de cero; no me sirve nada, no me sirve el ‘setting’, no me sirven los mapas ni el freno motor: no me sirve nada de lo que hemos trabajado. Simplemente es cuestión de tiempo, de entender y de trabajar un poco“, declaraba.
“Este es un circuito que me gusta mucho. Podría decir que me gustaría salir y ganar porque es uno de mis circuitos favoritos. También para mi estilo de pilotaje viene muy bien, pero claro, sin salir a pista no podemos crear esas expectativas como hemos hecho, ¿no? Quiero salir al FP1, ver que todo funciona y ver que uno de los pasos que dimos ese domingo en Austria va en la dirección correcta. Si vamos en la dirección correcta, pues a intentar estar ahí; ese es el principal objetivo”, contaba.
¿Hay alguien en el equipo encargado de la estrategia? “Tenemos al jefe mecánico, pero por encima de él no hay nadie. En ningún equipo. Cada uno hace su trabajo. Durante el fin de semana, en vez de tomarnos dos carreras para dar vueltas y entender mejor la moto, salimos en el FP1, nos vemos bien, y en el FP2 ya empezamos a cambiar un poquito para ver si mejora. Ahí es cuando empiezan los problemas. Es algo que hemos visto desde fuera y que deberíamos corregir”.
“La 24 tiene muchísimo potencial”
“Lo único que me falta con esta moto es recuperar el ‘feeling’ que tenía con la moto anterior, especialmente en la frenada. Es un poco difícil, sobre todo con tanto alerón; me cuesta poner la moto donde quiero. Con la 23 lo tenía muy claro, tenía mucha confianza y eso es lo único que necesito recuperar“, revelaba.
¿Fue un acierto usar la 24? “Sí, aunque aún cueste un poco, la 24 tiene muchísimo potencial. Había carreras que, con la 23, yo entraba y decía, ‘no tengo más, no hay más, no sé dónde rascar’. Con la 24 veo que hay mucho margen. Veo lo que hace Aleix, veo lo que hace Maverick, y en algunas carreras lo que hace Miguel. Veo que hay mucho potencial. Simplemente hay que volver a construir la base de confianza en esta moto, y estamos en ese proceso“, finalizaba.
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