Pasados ya unos días desde su adiós a MotoGP, Valentino Rossi habla de su despedida en Valencia, todas las sorpresas de un fin de semana muy emotivo y la felicidad que sintió al llegar a su box, con toda su gente esperándole para comenzar las celebraciones.
Han pasado ya unos días desde su despedida, pero Valentino Rossi sigue más vivo que nunca en el paddock de MotoGP. Un Mundial que ya se ha desplazado hasta Jerez, donde será extraño no ver al italiano en los primeros test de la pretemporada 2022. A su plaza llegará este mismo jueves Darryn Binder, mientras Il Dottore se prepara ya para afrontar su reto en las cuatro ruedas. En su adiós al Mundial que tanto le debe, el de Yamaha pudo hablar de sus sentimientos, de los agradecido que estaba por todas las sorpresas del fin de semana y de sus arrepentimiento durante sus años como piloto. Y, todo, sin dejar escapar ni una lágrima.
Fin de semana de su despedida en Valencia: «Muy especial. Estaba un poco preocupado, no sabía cómo me sentiría, si sería posible mantener la concentración. Pero fue un gran fin de semana, desde el jueves, con muchas sorpresas».
Las mayores sorpresas: «No esperaba ver a mis pilotos con mis cascos y mis nueve motos con las que gané el título expuestas en el paddock. También me gustó recibir mucho respeto de todos los pilotos, incluso en la rueda de prensa del jueves, y de toda la gente del paddock. No es tan normal».
Terminar décimo en su última carrera en MotoGP: «En primer lugar, hemos trabajado bien con el equipo y la moto ha mejorado en la FP3. Del sábado al domingo hemos progresado más, Pecco me ayudó a mantenerme en el top 10 y a partir de ahí se puede hacer otra carrera. Hoy estaba motivado como si me jugara el título. La última carrera es muy importante, nunca la olvidarás. Ha sido difícil mantener la concentración, pero he pilotado bien, no he cometido ningún error, ha sido fantástico. Terminé mi larga carrera con los diez mejores del mundo: podré decir durante mucho tiempo que terminé entre los 10. En los boxes al final había mucho ruido, era una sensación que echaba de menos».
El 2022 para los pilotos de la Academia: «El año que viene tendremos cuatro chicos en MotoGP. Espero que uno de ellos, creo que Pecco, pero también Franco, pueda luchar por el título. Pueden convertirse en superestrellas de MotoGP».
Valoración de su última temporada: «En las últimas carreras hemos mejorado mucho la moto, hemos trabajado bien con David y Matteo. Fue un año difícil, crucial para decidir si continuar o no, pero los resultados no llegaban. Era fácil rendirse tras anunciar su retirada, pero nadie lo hizo. Y después de Portimao no quería terminar último aquí. Ha sido mi mejor carrera de la temporada».
Dos palabras que describan su carrera: «Divertido y muy competitivo».
No hubo lágrimas en su adiós: «Lo haré esta noche (domingo pasado), te enviaré un vídeo (risas). Estaba un poco preocupado por esta última carrera, pero terminó a mi estilo, en la felicidad. Intentaron por todos los medios hacerme llorar, pero no lo consiguieron. Fue una fiesta agradable, me sentí bien: tal vez me detenga en 2022…».
Su espinita clavada: «Bromas aparte, me alegro de que haya terminado, aunque ahora siga viendo el GP de hoy como el último del año, no de mi carrera. Lo entenderé mejor en marzo. Esperaba ganar el décimo título, pero no puedo quejarme de mis resultados. Si hubiera trabajado tan duro al principio como al final, quizá habría ganado aún más».
Ronaldo, uno de sus ídolos, estuvo presente como sorpresa: «Es mi ídolo, más allá de los deportistas del motor, es mi héroe. Ronaldo me dio lo mismo que a otros, con él entendí más lo que significa «estar al otro lado». Hablando de fans: mi sueño siempre ha sido saltar al público como hizo Jim Morrison en Los Ángeles en 1978. Quería hacerlo en Mugello, pero tenía miedo de desaparecer y no volver nunca más…».
Su última vuelta: «Realmente intenté no pensar que era la última vuelta, pensé muy pocas veces durante la carrera que era la última. Fue una gran prueba psicológica. La moto iba bastante bien al final, con menos combustible entraba fuerte en las curvas. Hice todo lo que pude para estar por delante de Franco, siempre podré echarle en cara el haber estado por delante de él todo el tiempo que estuve.
Arrepentimientos en su carrera deportiva: «Si tuviera que volver a hacerlo, volvería a hacer el fin de semana de Valencia de 2006: me habría preparado mejor y quizá no me habría estrellado. En 2015 hice todo lo que tenía que hacer, pero no fue mi culpa que perdiera. Eso fue lo que más lamenté. En 2006 podría haber estado bien, venía de tantas victorias seguidas, estaba bien perder. En 2015 habría alcanzado 10 laureles, habría prolongado seis años mi carrera de campeón del mundo. Me dolió terminar así.
Sorprendido por sus sentimientos: «En la víspera de la carrera pensé que estaría triste y desesperado al final del GP. Ahora es un poco sorprendente ser tan feliz. No es como ganar una carrera o un campeonato, pero me he divertido, ha sido bonito, he disfrutado como si hubiera ganado un campeonato del mundo».
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