Valentino Rossi termina el Gran Premio de Austria octavo tras una apuesta fallida de no cambiar de neumáticos en condiciones de lluvia intensa.
A punto de conseguir su podio numero 200 ha terminado Valentino Rossi el Gran Premio de Austria. El italiano que sufrido durante la primera parte de la carrera ha visto como sus posibilidades se abrían con la llegada de la lluvia. Il Dottore ha querido jugársela y no cambiar neumáticos pese a la hostilidad de la pista, sin embargo, la apuesta no le ha terminado de salir del todo bien. A pesar de ello, Rossi termina octavo en el trazado austriaco y se va a casa con una sonrisa en la cara.
Rozando el podio
Una carrera de locura. “Hubiera sido genial terminar en el podio, estaba pilotando bien cuando vi P3 en el tablero con dos vueltas para el final. Así que en la siguiente primera curva me asusté, me puse rígido y me fui largo. Luego vinieron los de la lluvia y nos pasaron. Fue un final muy emocionante ”.
Un final emocionante. “Si claro. Fue muy emocionante, una carrera increíble, el punto de intercambio entre slicks y lluvias llegó en las tres últimas curvas. En ese momento decidí no parar porque quedaban cinco vueltas. Y precisamente a tres vueltas del final yo también estaba en el podio, en tercera posición. De todas formas la posición final es buena para mí y para el equipo que está pasando por un momento difícil ”.
Slicks en lluvia
Decidió continuar con slicks en lluvia. “Normalmente no sigues con slicks, pero la lluvia empezó poco a poco y al principio hubo problemas solo en las curvas 3 y 6, el resto estaba seco y se pudo mantener calientes los neumáticos y los frenos, pero en la última y penúltimo era tan fácil cometer errores. Pero no parar fue la decisión acertada”.
¿Por qué? “En estas situaciones es difícil tener la regla perfecta. Una situación de este tipo sería perfecta: si estáis todos con los slicks y llega la lluvia, la carrera se detiene y la clasificación se da en la primera vuelta. Esto es lo más seguro. Pero ahora la regla es diferente, y en esta situación prefiero quedarme con los slicks en lugar de regresar o comenzar de nuevo. Sería más peligroso. Pero no fue un desafío para mí, no es que decidiera arriesgarme, cuando estás en la moto solo intentas hacer lo que crees que es mejor para el resultado. Siempre es una decisión instintiva pero con seis vueltas pierdes un minuto y no hubo diluvio”.
Un domingo especial
Pelea con su hermano Luca Marini. “Fue un gran momento con Luca. Sabía que íbamos a pelear aquí en el Red Bull Ring porque teníamos el mismo ritmo, y también tuve algunas buenas batallas con Lecuona. Honestamente, lo pasamos muy bien, ¡el problema es que yo tengo la misma edad que ellos dos juntos! De todos modos nos divertimos y al final Luca me ganó, me frenó. Nos volveremos a encontrar en Silverstone ”.
El homenaje en el Red Bull Ring. “Fue emocionante: el helicóptero, la pancarta con el agradecimiento de la KTM… Hoy ha sido un buen día, es la primera vez que hemos tenido público, una situación normal, con muchos aficionados con camisetas y gorras amarillas. Fue útil para mí y también para el equipo porque había una mala noticia para el equipo. Y la primera parte de la temporada fue mala, en Barcelona, en Portugal, en Assen, con caídas. Ese no soy yo. Aquí me sentí mejor sobre la moto: ciertamente no gano el campeonato mundial, pero terminar entre los diez primeros en las últimas carreras sería un poco diferente. Tenemos que hacerlo hasta el final … unos diez primeros y conseguir algunos puntos. ¿Redondear los podios a 200? Mira, todavía no me he rendido, estoy entrenando y tratando de concentrarme. Cuando me subo a la moto no me parece que haya decidido retirarme a final de temporada, sino que tengo que hacer más años. Lo intentaré hasta el final “.
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