Tal vez la historia del campeonato sería diferente si hace algunos años Valentino Rossi hubiese firmado por la marca japonesa.
Hubo un tiempo en el Mundial de MotoGP en el que los caminos de Valentino Rossi y Suzuki estuvieron más cerca de lo que nadie pueda pensar. La marca japonesa tentó al nueve veces campeón del mundo y sólo algunos detalles hicieron que este binomio quedase en el limbo. El exdirector de Suzuki, Davide Brivio, explica en una entrevista para Slick Magazine cómo fue aquella historia que pudo haber cambiado el devenir del campeonato para siempre.
Davide Brivio, quien trabajó con Valentino hace más de una década, arrancaba la historia remontándose al año 2011. «Tenemos que empezar desde 2011, cuando trabajé para Valentino. Yo también dejé Yamaha a finales de 2010, como él. A finales de 2011 Suzuki dejó MotoGP, pero en el paddock se sabía que querían dejarlo ya a finales de 2010, así que en 2011 corrieron alineando sólo una moto, para cumplir así el contrato con Dorna«, analizaba el italiano.
Davide continuaba rescatando hechos del pasado, para contextualizar lo ocurrido. «En el comunicado oficial anunciando la retirada estaba escrito ‘volveremos’, así que en el paddock se sabía que la historia no acabaría ahí«, destacaba sobre el comunicado que lanzó Suzuki. «Pero ciertamente yo, en aquel momento, no pensaba que pronto tendría que lidiar con Suzuki«, añadía.
En aquellos años, Valentino decidió unirse a Ducati. Una conjunción ansiada por toda Italia en ese momento y que, al final, no pudo salir peor. La idea de ver a una marca italiana ganar con el piloto italiano referente del momento se desvanecía carrera a carrera, pues la moto de los de Borgo Panigale estaba lejos de ser competitiva…
¿Qué salió mal?
El jefe de equipo italiano proseguía: «A principios de 2012, el jefe de Suzuki MotoGP, Shinichi Sahara, se puso en contacto conmigo. Me dijo: ‘Realmente queremos volver, y lo haremos en 2014, así que me gustaría saber si Valentino está interesado en unirse al proyecto’«, explicaba Brivio.
En aquel momento, Valentino dejaba Ducati ante la incapacidad de conseguir buenos resultados y luchar por su décimo título mundial, de modo que ambos caminos parecían confluir. Sin embargo, una cuestión de tiempo hizo que esta unión quedase en un mero deseo utópico. «Se lo comenté a Valentino, sabiendo que su contrato con Ducati era válido hasta el final del campeonato de 2012 ,y me dijo que necesitaba una moto para 2013, no para 2014. Así que no podía esperar a Suzuki«, afirmaba Davide.
«Y eso es exactamente lo que le dije a Shinichi Sahara: ‘Gracias por tu interés, pero no podemos hacer nada’«, finalizaba Davide Brivio. El tiempo estuvo cerca de poder unir a dos históricos del motociclismo. Ahora, en 2023, la historia ha cambiado mucho y el Mundial no podrá disfrutar de ninguno de ellos, tras la reciente salida de Suzuki del campeonato. (Fuente: James Dielhenn, Crash.net, 25/12/2022)
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