El GP de la Emilia Romagna dejó uno de los mayores sustos de la temporada. Una caída de Joan Mir en las zonas rápidas del circuito hizo que la moto fuera con fuerza hasta la torre donde se sitúan las cámaras de televisión, haciendo que el profesional soltara todo y saliera corriendo. Luego, el de Suzuki tuvo un bonito detalle.
Tremendo susto el que se vivió el pasado fin de semana en el Gran Premio de la Emilia Romagna. De esos en los que vuelves a nacer. No para el piloto, si no para la persona que está detrás de cámaras y que pocas veces se valora. Y es que, en un gran premio donde se llegaron a contabilizar 51 caídas, Joan Mir fue uno de los implicados en estas caídas. De hecho, es que era algo casi con lo que se contaba, porque la pista italiana estaba tan delicada con el frío y la lluvia que un mínimo cambio en cada curva, te llevaba a cometer un error de dimensiones incalculables.
Hay que tuvo suerte, como Joan Mir, otros no tanto, como Savadori, que tuvo que pasar por la clínica móvil y verse obligado a abandonar el fin de semana en el que regresaba a MotoGP como wildcard. Y otros, tuvieron mucha más suerte. Es el caso del cámara que estaba colocado justo en la zona donde el de Suzuki se fue al suelo. Allí, en una de las zonas más rápidas del circuito, se encuentra una de las muchas torres que hay a lo largo del trazado, colocadas estratégicamente para que las cámaras de televisión puedan captar la acción en todo momento, sin perder detalle. Sin embargo, en ese momento, era mejor no captarlo.
Con la caída de Mir, la moto fue directa a las protecciones y, como consecuencia, hacia la torre donde el cámara estaba colocado. Viendo la situación, soltó la cámara y salió de allí, viendo lo peligrosa que había sido la acción. Tras eso, el campeón del mundo pudo hablar con el cámara en su box y disculparse por el suceso. «Vaya susto, ¿verdad? No te vi», le comenta el de Suzuki. «¿Qué pasó? ¿La moto chocó y tú te caíste de la torre?, añade.
«Yo lo que no vi fue tu moto. Yo fui a por ti y al perder de vista la moto, es algo que viene muy rápido. Pero ya está, un susto y un golpecito«, relata el cámara, que le quita impotencia al suceso. «Tenemos un sistema de absorción de seguridad con una malla, y lo fue absorbiendo hasta que la cámara me dio a mí y me golpeé un poco con el hierro de detrás, como el dolor intenso cuanto te pegan en el tobillo. También me di cuenta de que tú estabas mirando hacia arriba como diciendo ‘se ha liado parda'». Como detalle, Mir le regaló las botas firmadas y le agradeció su trabajo.
This cameraman had a very lucky escape on Saturday! ?@JoanMirOfficial caught up with him and was glad to see he was ok! ?#EmiliaRomagnaGP ? pic.twitter.com/XgG7K7Hsa1
— MotoGP™? (@MotoGP) October 25, 2021
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