DAZN ha presentado un nuevo documental: “Maverick Viñales: Dos vidas”
Maverick Viñales correrá la próxima temporada con un nuevo equipo, esta vez con KTM. Esta pasada temporada el piloto conquistó el récord de ser el único piloto de la historia de MotoGP en ganar una carrera con tres marcas diferentes (Suzuki, Yamaha y Aprilia). Ahora, con KTM, seguro que Maverick trata de conseguir los mejores resultados posibles para ganar con una nueva marca.
En este nuevo documental de DAZN, el piloto hace un repaso por su temporada y por su carrera deportiva, destacando los aspectos más importantes para él. El primer vídeo que le mostraban al piloto fue el emotivo momento cuando ganó en Austin 2024, momento donde él mismo confesó haberse planteado “tirar la toalla”.
Si hay algo que es importante para los pilotos es su vida personal, y por supuesto sus familias. Maverick Viñales siempre tiene presente a su mujer y a sus hijas: “Ser padre lo concibo como algo muy altruista, hay que ser muy generoso. El 95% de las ocasiones hay que dar el brazo a torcer” exponía. “Creo que ser padre ha sumado bastante en todo lo que envuelve al motociclismo. A mí no me ha frenado el tener familia, todo lo contrario. Por suerte, nuestro deporte está bien pagado y mi familia tiene el futuro asegurado. A mi ellos no me frenan, todo lo contrario”
“Aprilia ha sido un dolor de cabeza monumental, desde el minuto uno”
Maverick hacía un repaso de cómo fue su recorrido en Aprilia: “Aprilia ha sido un dolor de cabeza monumental, desde el minuto uno” decía Viñales entre risas. “Pero al final lo he conseguido. Austin fue una carrera de decir ‘aquí estoy yo’. Para mí fue la mejor carrera de mi vida deportiva, fue como un videojuego. Necesitaba demostrar a la gente cosas. Ganar con tres marcas diferentes en la época de los cuatro tiempos… solo está mi nombre”
Austin, el principio de las dudas de Viñales: “Pero esa carrera fue un arma de doble filo para mí. Empecé a plantearme ‘¿Por qué no lo hago cada día?’ Pensé que eso significaba que no estaba en el lugar correcto. Fue muy difícil adaptarme a la moto. Aprilia podría perfectamente haberme cerrado en Qatar, les avisé… les dije que luego sería mucho más costoso, pero me dijeron de esperar a Mugello. Entonces dije, ‘Vale, Maverick, piensa en ti y en tu nuevo reto’. Pensé que solo me quedaba la opción de ir a KTM y ser el retador. En Ducati no hubiese tenido las mismas armas que las motos oficiales. Si Bastianini va a KTM es que mucho no me equivoco. Él viene de Ducati, y si no va a Aprilia por algo es” exponía Maverick, justificando así también su decisión.
Llegada a Yamaha
Para continuar, Viñales repasaba sus años en Yamaha, los que recuerda con nostalgia al principio: “Recuerdo cuando entré en Yamaha, entré como un misil y con una idea muy clara. Lo único que les pedí era que yo quería ser campeón del Mundo. Lo demás no me interesaba. Recuerdo cuando me monté en la Yamaha me enamoré de ella en el primer momento, todo salía solo y fácil. Fue la moto que dejó Jorge (Lorenzo). Cuando llegué a Sepang (a los test)… ¿dónde estaba esa moto? Me dijeron que había que correr con la nueva. Pero todo seguía saliendo muy fácil. Recuerdo que incluso le gané una carrera a mi ídolo Valentino Rossi, de tú a tú”
“En Montmeló empezaron a cambiar cosas, empezaron a cambiar prácticamente toda la moto, y por eso me frustró mucho. Era mi año, yo estaba muy fuerte y los demás no tanto. Y me dolió mucho. Nadie tenía mi velocidad ese año, pero no conseguimos ser competitivos por A o por B. 2018 fue mi peor año. Pero en 2019 la moto volvía a ir muy bien. Fuimos los únicos realmente en plantarle cara a Marc”
Llegó 2020, y Maverick expresó que Yamaha no dejaba continuidad a las motos, pues los cambios eran constantes. Además, aprovechó para hablar de la situación vivida en Austria 2020, donde un grave accidente casi determina el camino tanto de él como de Valentino Rossi: “Yo estaba en carrera, estaba bien posicionado. Yo no vi nada, solamente vi venir una moto y me agaché para que pasara por encima. No entendí nada, solo vi motos volando. Creo que lo analicé dos o tres días después”
Poco después, muchos recordarán el incidente que llevó a Maverick Viñales a tener que lanzarse de su moto en marcha por no poder frenarla. Así lo explicaba: “En Estiria me fallaban los frenos, y yo no entendía que se gastaban. Tiré a frenar y no frenó. No se pusieron nuevos frenos para la carrera, y simplemente pasó eso. Fue un error humano. Fue una sensación muy fea, incluso a día de hoy me aseguro que vayan bien. Mucha gente dice que fue mi culpa, pero, ¿qué persona se quiere quedar sin frenos? Me fastidió mucho, era un buen año para luchar por el campeonato” exponía.
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