Maverick Viñales quiere acabar el año ganando con Yamaha, sobre 2022 confirma que no tiene ningún acuerdo en MotoGP, y descarta tomarse un año sabático como Dovizioso.
La relación entre Yamaha y Maverick Viñales no ha sido como se esperaba, los resultados no han llegado y finalmente separan sus caminos antes de lo acordado. A final de temporada, Maverick Viñales abandona Yamaha. Tras el último Gran Premio se dió a conocer la noticia, y desde entonces pocas son las declaraciones que ha dado el piloto de Roses de su futuro. Todo apunta a que acabará corriendo en Aprilia en 2022, sin embargo el piloto ha negado que tenga un acuerdo para la próxima temporada.
Para 2022, Viñales busca un equipo que le brinde confianza: “No es una cuestión de que la moto o el equipo no funcionen. Es una cuestión de la confianza que necesito a mi alrededor para construir algo bueno. Todo es muy difícil en MotoGP, necesitas confianza para darlo todo. Lo frustrante para mí es no poder dar el 100%”. Así lo explicaba Viñales para La Vanguardia.
Con la mente puesta en Yamaha hasta final de temporada: “Quiero volver más fuerte que nunca después de este parón. Afronto lo que queda de temporada al máximo, quiero ganar como sea. Hay que intentar estar al máximo y que el resto acompañe”.
Sin acuerdos y con la retirada por un año como última opción. “No estoy pensando en 2022, porque no tiene sentido hacerlo ahora, no tengo ningún acuerdo. Pero me lo tomaré con calma y veré qué pasa para el futuro, pero ahora mismo no sé nada. No es fácil, porque lo realmente importante es correr. En este deporte quedarse quieto durante un año puede ser un problema. Pero tengo que disfrutar, divertirme y dar lo mejor de mí. Me lo quiero tomar con calma porque es importante pensar en uno mismo y al final, haré lo que más me compense”.
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