Lin Jarvis habla sobre sus pilotos de Yamaha antes de correr en Valencia la semana que viene.
Por un lado del box está Franco Morbidelli, que en la cita anterior celebrada en Sepang no tuvo suerte y fue sancionado. Por otro lado, Fabio Quartararo pudo subir al podio para seguir dentro de los candidatos al campeonato, aunque no lo tendrá fácil en Valencia y menos contando con que tiene un dedo roto. Lin Jarvis habla de ambos para Motorsport y MotoGP.
Respecto al italiano: «Franco quiere entender todos los aspectos técnicos de la moto», afirma Jarvis. «Algunas veces eso ayuda, pero también hay otros momentos en los que el piloto pasa a estar demasiado involucrado en la puesta a punto, en vez de limitarse a transmitir sus sensaciones y sus necesidades y dejar que los técnicos e ingenieros hagan su trabajo. Pero con este nuevo enfoque es el equipo el que decide esos aspectos de la moto», comentó el director general de Yamaha.
«Franky promocionó al equipo oficial antes de tiempo, y cuando lo hizo estaba lesionado», justifica que fue algo precipitado en ese momento. «En invierno resolvió sus problemas de rodilla, de modo que, definitivamente esperábamos más de él esta temporada. Seguramente, haberse quedado media temporada sin correr no le ayudó. Además, tener un compañero tan rápido como Fabio nunca es fácil», dijo Lin Jarvis.
«Todavía estamos en el juego, así que tenemos que estar contentos con eso»
Por otro lado, habló del campeonato a la web de MotoGP: «Todavía estamos en el juego, así que tenemos que estar contentos con eso. Nunca se sabe, pero está claro, tenemos que ganar la carrera, lo que no es fácil y podemos tener mala suerte», declaró Jarvis. «En este juego todo puede pasar. Recuerdo ir a Valencia en 2006 con Valentino Rossi, la idea era que Valentino ganara la carrera, pero Vale se cayó y Nicky [Hayden] ganó el título. Sé que Valencia es un circuito muy difícil, puede pasar cualquier cosa».
Sobre Cheste, Lin Jarvis asegura que no es el circuito más idóneo para la Yamaha. «Esta pista no es tan fácil para nosotros. Ser duodécimo en parrilla y acabar tercero es algo. Tener un dedo roto y hacer ese resultado es impresionante, y podría ver que pilota de esta manera igualmente; preciso y suave. Creo que le da confianza a él. Veremos, necesitamos ayuda de ahí fuera», zanjó el de Yamaha. (Fuente: Motorsport, MotoGP)
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