Johann Zarco terminó octavo el Gran Premio de España después de la caída de Álex Rins y la lesión de Quartararo. El francés cree que la situación sería peor si su compatriota hubiese ganado.
Johann Zarco no terminó muy contento el domingo en Jerez después de acabar octavo en la carrera del doblete de Ducati. El francés esperaba más del Gran Premio de España aunque reconoce que lo primordial era no sumar un nuevo cero como en el caso de Portimao. Además, el del Pramac cree que la situación podría haber sido peor si su compatriota, Fabio Quartararo, hubiese ganado y hubiese aumentado la diferencia de puntos aún más.
La espinita clavada de la caída en Portimao. «Yo no quería cometer ese error. Era el objetivo principal. Sabía que la Ducati era rápida en esta pista. La carrera ha sido bastante buena en cuanto a ritmo, pero me ha costado sentirme cómodo. No creo que haya hecho una gran salida. Por la posición al principio me costó quizás también. Los demás iban bastante confiados al principio y perdí bastantes puestos«.
Testigo de la caída de Rins. «Rins se confió demasiado porque se abrió y eso le hizo caer. Binder creo que también se cayó [por eso] en la curva 2. Vas al límite y cuando intentas marcar la diferencia porque crees que puedes hacerlo, te puedes llevar una sorpresa«.
«Bagnaia gestiona muy bien toda la carrera porque también parece muy tranquilo»
Octava posición. “El octavo lugar no es muy bueno y fue un poco decepcionante, pero cuando vi que solo quedé a siete segundos del ganador, no es para tanto, porque tuve algunos problemas y no estaba del todo cómodo. Que Miller gane, para el campeonato es bueno. Mi suerte es que Fabio no ha sacado muchos puntos, porque si hubiera ganado la diferencia habría sido importante”.
El potencial de Ducati. «Tener dos Ducati primera y segunda confirma que el potencial es muy alto. Durante todo el fin de semana he podido ser rápido. En el test trataré de prepararme para Le Mans, una pista diferente. Tenemos que probar una suspensión, pero no hay que hacer mucho. Ya somos buenos y no hace falta una revolución. Solo tenemos que encontrar algo que me dé mejores sensaciones«.
Bagnaia señaló que los pilotos de la VR46 Academy nunca tuvieron que someterse a una cirugía de síndrome compartimental, probablemente debido al entrenamiento frecuente que hacen. «Puedo estar de acuerdo. Estoy de acuerdo porque es cierto que entrenan bastante, y con mucha intensidad, en su rancho. Yo, al final, tenía dolor en el antebrazo derecho porque es el que controla todo. Pero sé que cuando tengo dolor, para mí, es más una señal de falta de tranquilidad que un síndrome compartimental. Por eso: ¡vamos tan rápido! La moto tiene capacidad casi todo el tiempo, ya sea la Yamaha, la Ducati o incluso otras, pero a veces, por un poco que no estamos del todo a gusto, como sabemos que podemos ir rápido, lo intentamos, pero luego el cuerpo se vuelve un poco al límite. Entonces creo que hay algo de eso. Después, Bagnaia gestiona muy bien toda la carrera porque también parece muy tranquilo, así que en mi opinión se las arregla para no exagerar cuando las cosas no van bien«.
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