El francés no quiere pensar en la posibilidad de vestir de rojo en 2023. La lucha por un hueco con Ducati ha empezado.
Que la temporada que viene Jack Miller no seguirá en Ducati es, cada vez más, una obviedad. La marca italiana ya renovó a Pecco Bagnaia, pero aún tiene que completar el box. El piloto australiano no está cuajando un gran inicio de temporada; y el 2021 no fue el esperado por la marca italiana. Una ornada de jóvenes acecha una oportunidad única. Hablamos de los Jorge Martín, Enea Bastianini o, incluso, Luca Marini. Durante el 2022, además de tener otros objetivos, todos los mencionados darán un plus para estar sobre la mesa de Gigi Dall’Igna y compañía cuando decidan quién debe acompañar a Pecco. En esa lista, Johann Zarco tal vez no esté, y él mismo se aparta de esa lucha.
El objetivo del piloto francés es seguir pilotando. Sabe que la competitividad es máxima, aunque él ya suma un podio esta temporada. Zarco es consciente de que necesita un buen rendimiento para seguir en Ducati, pero de no ser así no vería con malos ojos cambiar de fábrica. «No pienso todavía en ello. Quiero pilotar bien, tener buenos resultados, eso es lo primero que quiero. Si mi rendimiento es bueno tendré oportunidades de seguir en Ducati, o quizá pensar en otras fábricas».
Zarco, para conseguir el hueco en el box oficial de Ducati, debería ser superior a todos los jóvenes pilotos mencionados anteriormente. El francés también es consiente de que la fábrica puede decantarse antes por un piloto con recorrido que por él. Es por ello que Zarco ve con buenos ojos quedarse en Pramac. «Tal vez hay pilotos más jóvenes que puedan ser interesantes para los equipos de fábrica, pero mientras pueda luchar por los podios con Pramac creo que sería bueno quedarme aquí, seguir construyendo algo en lo que confiemos, eso puede ser muy bueno».
En Ducati saben perfectamente qué es lo que quiere Zarco, aunque reconoce que el hecho de no tener un manager puede afectar negativamente a la decisión final. «No tengo un manager que esté ahí para poner presión a los equipos y explicarles lo bueno que soy durante todo el fin de semana. Por eso espero que mi rendimiento pueda contrarrestar esas charlas. Ducati conoce muy bien mi posición. Saben muy bien que estoy haciendo todo lo posible para llegar allí y que estoy motivado, pero no tengo a nadie que los presione durante todo el fin de semana. El objetivo, lo principal es quedarme con Ducati porque creo que se está construyendo algo que va a ser realmente bueno, y ese es el primer paso».
Zarco tiene contrato con Pramac hasta 2022. La renovación está en el aire, como la otros tantos pilotos. Todos son conscientes de que en 2023 puede haber un tremendo baile de sillines en el paddock. El francés espera que la decisión de seguir o no en Pramac se sepa antes del verano. «Llegará cuando tenga que llegar. Creo que si todo el mundo quiere cerrar antes del verano, yo también lo haré».
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