Youngtimmer es un término anglosajón que se refiere a las motos de los años 80/90. Y cada vez hay más gente jóven que busca y compra este tipo de motos. ¿Porqué?
Pues básicamente por 2 motivos: por un lado comprar motos accesibles y baratas de precio. Motos que ya no se deprecian más y que si se cuidan bien incluso pueden revalorizarse. Motos que pueden adquirirse por cantidades irrisorias frente a los precios de motos nuevas.
Y por otro lado, el placer de poseer una moto que va a funcionar a plena satisfacción y en la que uno puede entretenerse en los mantenimientos y mejoras. Motos que por otra parte, fueron lo mejor de la industria motera y tienen una carga emocional muy alta. Pero no sólo es carga emocional: son motos que fueron punteras hace unos años y que en muchos aspectos siguen estando muy actualizadas.
Casos como la mítica Yamaha Super Teneré de 750, la Africa Twin, o alguna versión GS de la BMW de los años 90, reinas del desierto, o de las Honfa VFR 750, CBR 600/900, Yamahas R1, R6 y algunos modelos de Suzuki o Kawasaki. Pero hay muchas motos más: ruteras, urbanas, deportivas o trail. Hay mucho donde elegir, y todo a unos excelentes precios de adquisición.
No nos referimos a compradores nostálgicos que no quieren abandonar su pasado. Estamos hablando de gente jóven que ha decidido que no merece la pena gastarse tanto dinero en una moto nueva, trufada de electrónica, con costes de mantenimiento y adquisición (y seguros) altos y que proporciornalmente y en términos de disfrute no dan tanto como las motos más antiguas.
Youngtimmer es un término que separa a las motos actuales de las motos viejas. Surge en Alemania para todos aquellos coches de los años 80 y 90 que aún no son Oldtimmer (esos si son los viejos) y que pueden dar buen uso en el día a día. Y con esa misma filosofía, surgen las motos Youngtimmer, que no son tan viejas como para ser clásicas (aunque alguna ya lo sea) y se convierten en una excelente opción para comprar muy buenas motos a precios muy contenidos.
De hecho, es un movimiento que se está poniendo de moda en toda Europa, y ya empiezan a proliferar publicaciones temáticas e incluso tiendas especializadas. Comprar una Youngtimmer abre el mercado (de nuevo) al comercio de piezas y preparaciones para mejorar las motos, como ya sucedía hace 20 años, pero con una inversión mucho menor que la que supone la compra de una moto nueva.
Los gloriosos años 90
En los años 90, por ejemplo, las motos ya se fabricaban con muy altos standars de calidad. Fueron los años del desarrollo de la moto deportiva y ya se alcanzaron los 300 km/h. También fué la decada donde se construyeron las mejores motos de Trail, que pasaron del uso desértico al uso rutero: grandes y cómodas motos para viajar y para acometer aventuras. Y no exentas de tecnología, pues la electrónica ya empezaba a ser importante en las motos. De hecho, los conceptos técnicos de la mayoría de las motos de esa década siguen vigentes.
Todas excelentes motos y que nos permiten acceder al mundo de la moto con presupuestos de entre los 1.000 y 3.000€ (dependiendo de moto y estado). Motos que, además, nos van a dar muchas satisfacciones en el uso diario por carretera o de fin de semana. El placer de disfrutar estas motos no es directamente proporcional al coste de adquisición y mantenimiento. Al contrario, juega mucho a su favor. Cuestan muy poco para las satisfacciones que nos van a dar.
Quien haya hecho rutas con una GSXR 750, una R1 o una Honda CBR o VFR de los años 90, o incluso motos más turísticas como una Yamaha TDM o una Kawa Zephir saben perfectamente que son motos absolutamente válidas para rutear, viajar y disfrutar del placer de ir en moto. Bien cuidadas y bien mantenidas, siguen siendo motos que merecen la pena.
¿Nostalgia o compra inteligente?
Y según para qué usos, por ejemplo para quien quiera ir de aventuras al desierto o hacer mucho Trail, las BMW GS 800 (las boxer), Suzuki BIG 750, Yamaha Teneres 600 de los 90 son probablemente las mejores elecciones posibles por ser menos sofisticadas, más sencillas y menos comprometidas. Y por supuesto, mucho más baratas que las actuales super Trail de 15.000 o 20.000€ de las marcas punteras. Es decir, no es una elección basada en la nostalgia, es probablemente una compra inteligente basada en una intangible relación disfrute/ precio.
Para viajar cómodo y en dúo, tambien hay mucha oferta disponible: BMW Boxer RT y RS, BMW K, Yamaha FJR 1300, e incluso Honda Gold Wings por menos de 6.000€.
Evidentemente, son motos que no llevan ABS, que no tienen diferentes mapeos de motor ni ayudas electrónicas. Son motos que se conducen por instinto, de forma natural y poniendo énfasis en la conducción. Son motos con una dimensión más humana. Es la elección de una conducción más pura, sin ayudas y mucho más auténtica.
Esto no sólo está ocurriendo en las motos, también en los coches, donde modelos de Audi, BMW, Mercedes o Volvo de los años 90 siguen luciendo estupendamente y pueden ser una magnífica y barata opción como coche de uso no urbano.
La incoherente clase política que padecemos en España y en Europa está en una política de arrasar con todo lo que “huela” a motor de combustión. Así que hay que aprovechar los últimos coletazos de libertad que aún nos permiten… los Youngtimmers son una excelente opción, antes de que sólo podamos verlas en los museos o en los jpegs de las webs.
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