KTM renueva a las pequeñas deportivas de su gama RC con cambios en la parte ciclo, chasis, electrónica y motores adaptados a la Euro5.
Lo primero que llama la atención es el cambio estético que han sufrido con la nueva decoración. Ahora el diseño de la carrocería está inspirado en las motos de competición de la marca, con nuevos carenados más eficientes aerodinámicamente hablando en el que casi todos sus paneles han sido rediseñados. Se ha optimizado la protección contra el viento así como la gestión del flujo de calor, dirigiéndolo fuera del piloto. La nueva carrocería es fácilmente extraible gracias a un nuevo sistema de tornillería reducido y rápido. La gama de colores está inspirada en los equipos de la marca austriáca en MotoGP.
En cuanto a la parte ciclo, encontramos suspensiones WP APEX totalmente regulables en ambos modelos. Ambas cuentan con horquilla invertida con barras de 43 mm así como monoamortiguador trasero central. El ahorro de peso ha sido una de las prioridades a la hora de actualizar el modelo. Los nuevos frenos han supuesto un ahorro de 960 gr con respecto a la versión anterior. Ahora equipa un disco delantero de 320 mm con pinza ByBre. El ABS es de nueva factura e incorpora ABS en curva así como el modo ABS Supermoto, que permite desconectar este sistema en la rueda trasera.
El propulsor de ambas ha sufrido cambios para poder adaptarlo a la normativa Euro5. Aunque no se han anunciado cifras, la marca señala un aumento de la cifra de par gracias a un nuevo diseño de la caja de aire junto con un nuevo mapa de potencia. Los nuevos modelos incluyen control de tracción y acelerador electrónico así como la posibilidad de implementar opcionalmente un cambio quickshifter. Toda la electrónica la podremos controlar a través de una nueva pantalla TFT a color.
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