BMW ha sido un peso pesado indiscutible en el segmento de aventura desde que lanzó la R 80 G/S con motor bóxer en 1980
Durante muchos años, quienes conocen y entienden estas cuestiones genéticas han considerado a la GS de BMW una de las mejores motos del mundo. Y, en algunos círculos, LA mejor moto del mundo.
Es comprensible, considerando todos los factores. Es una moto de paseo soberbia: cómoda, bien equipada y capaz de hacer locuras de forma increíble, porque cualquier moto verdaderamente excepcional debe poseer esta capacidad cuando se le requiere. Está en el reglamento.
La GS también es, en las manos adecuadas, una increíble moto todoterreno que te llevará a lugares y rutas que te dejarán atónito. Incluso en las manos equivocadas, sus capacidades todoterreno son realmente especiales.
Y esto es importante, la GS puede aterrorizar a las motos deportivas diseñadas específicamente para este fin y a sus pilotos, adelantándolos en las curvas y lanzándose a toda velocidad. Gracias a su increíble tren delantero telescópico, su ergonomía, su distancia al suelo y su impecable ingeniería, es una de las motos con mejor manejo jamás diseñadas para la carretera.
En pocas palabras, y en buenas manos, la BMW GS puede alcanzar un nivel que te dejará boquiabierto. Es lo que es. Y es genial.
Pero, y sí, siempre hay un «pero», es grande y alta, y podía resultar bastante intimidante para pilotos más pequeños y algo indecisos. Y nunca ha sido bonita, su estética se inclina más a la función que a la forma, lo cual tiene su propio atractivo innato. Como un luchador de la UFC con orejas de coliflor y nariz chata, que sin embargo lleva a una supermodelo colgada del brazo porque sabe que su bestia de jaula puede hacer cosas que los hombres más guapos no pueden.
Este es el contexto que me permite afirmar lo siguiente: la nueva BMW R 1300 GS Trophy es notablemente mejor que la GS anterior. Es más ligera, más delgada y más potente. Todo lo necesario para que fuera mejor que su versión anterior.
Aquí tienes algunas cifras que nunca mienten. El modelo base anterior, la R 1250 GS, pesaba 249 kg, generaba 134 cv y 143 Nm de par. La nueva 1300 pesa 237 kg, genera 145 cc y 149 Nm de par.
También es mucho más bonita. Parece mucho menos… bueno, menos agresiva, supongo. Se ha vuelto más elegante y sus líneas son mucho más agradables a la vista. Incluso he visto algunas variantes personalizadas que son absolutamente impresionantes.
La BMW R 1300 GS Trophy viene de serie con un montón de extras
Control de arranque en pendiente, palancas y pantalla ajustables, estriberas rally, protector de motor, portaequipajes, freno motor ajustable… la lista es larga e impresionante. Pero si te gastas el dinero, elige la Opción 719 y disfruta del mundo y todo lo que hay en él, incluyendo el dispositivo de altura de manejo adaptativo. Este te bajará al frenar y te elevará (como en las alas de los ángeles bávaros) al arrancar. Con caballete central, los asientos tienen calefacción, cierre centralizado, modos de conducción más atractivos… ¡Qué demonios!, hay cosas que ni siquiera sabías que te gustarían en una moto. Pero supongo que eso es lo que significa «con todas las opciones». ¿El precio? Bueno, hay ligeras variaciones según el estado, pero parte de los 22.921€.
Hay que entender que con un tren delantero telescópico no hay hundimiento. Al menos, no tanto como para notarlo. Eso te permite frenar a fondo en una curva que entras demasiado rápido para tu cordura y salir sonriendo al final. Es como una especie de brujería que BMW lleva ofreciendo mucho tiempo, y esta es la mejor versión hasta la fecha. Es escalofriantemente buena.
¿Y qué hay del motor? Bueno, sigue siendo un bicilíndrico bóxer con un carácter similar al de la 1250, pero se ha aumentado la cilindrada, la potencia y el par. El resultado es una moto que, sin duda, se siente más vivaz, con más potencia en todo el rango de revoluciones.
La potencia es suave y urgente, y el motor es versátil, lo que significa que prácticamente puedes dejarlo en tercera marcha y nunca sentir que pierdes impulso.
La nueva BMW R 1300 GS Trophy también es notablemente más ligera
Esto beneficia enormemente a quienes buscan competir con motos deportivas rápidas. La facilidad con la que entra y sale de las curvas es asombrosa. Mantiene la trazada con precisión y los baches se van al diablo. Puedes subir y bajar la altura del asiento como un profesional, para ser lanzado con ese potente par motor y simplemente dejar atónitos a quienes te persiguen o intentan perderte. No te perderán. La exclusiva luz diurna en forma de X de la GS iluminará constantemente sus retrovisores.
BMW no suele cometer errores. Los alemanes son conocidos por su calidad y precisión, y, aunque la R 1300 GS quizá no sea la creación más perfecta de la marca, sigue siendo muy difícil encontrarle defectos.
En todo caso, el cambio rápido me pareció un poco torpe en las marchas bajas. Otros usuarios también lo han mencionado, pero no es un factor decisivo, simplemente debes de usar el embrague un poco más. Ya sabes, a la antigua usanza.
También debes tener en cuenta que existen alrededor de 500 versiones diferentes de la nueva 1300 GS. Sí, es una exageración, pero BMW puede ofrecerte desde una GS completamente diseñada para uso en carretera hasta una GS completamente equipada para recorrer África. Y todo lo demás. Y puedes combinar y básicamente construir tu propia GS a tu gusto. ¡Qué época tan especial!
Siempre fue difícil argumentar que la GS no era la mejor moto del mundo. En cierto modo no lo es. Pero ha sido la moto más vendida durante mucho tiempo. ¿Pero este nuevo modelo es mejor? Puedes sacar tus propias conclusiones. Yo ya he sacado las mías.
Equipamiento: Casco Leatt, Chaqueta Leatt, Pantalones PMJ, Guantes Leatt, Botas Sidi.
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