Iker Lecuona ha llevado a la Honda al podio, recogiendo los frutos de su gran trabajo y el de la marca.
Iker Lecuona ha explicado sus sensaciones tras coger bandera a cuadros en tercera posición hoy en Estoril. Hacía 2 años que esto no le pasaba, así que la sensación ha sido muy positiva como es normal, incluso tal emoción que ha habido lágrimas de por medio. El piloto de Honda ha compartido sus pensamientos con MotoSprint, así como ha recordado todo el sufrimiento que ha pasado hasta llegar hasta aquí.
Mucho tiempo sin subir al podio. «Más de dos años, es sinceramente un podio inesperado. Ayer dije que no podíamos luchar al 100% por la quinta posición y hoy estamos en el podio, así que es increíble. En las primeras vueltas me he tocado con Rinaldi en la curva 4. Casi me caigo, me han pasado varios pilotos y me he encontrado en la decimosexta posición. A partir de ese momento, sin embargo, empecé a adelantar pilotos en cada curva. Me sentía realmente bien, sobre todo en las frenadas, y cogí al primer grupo con mucha facilidad. Cuando he alcanzado a Van der Mark le he hecho una señal para que me siguiera, porque me sentía con ritmo para alcanzar también a Bassani en cabeza. Sólo tres pilotos han rodado en 1’37. y yo he sido uno de ellos».
«Ayer dije que no podíamos luchar al 100% por la quinta posición y hoy estamos en el podio»
Lecuona pudo mantener un buen ritmo. «El único problema que hemos podido tener ha sido la duración de los neumáticos porque no hemos tenido tiempo de hacer kilómetros durante los entrenamientos. He puesto mi ritmo a 1’37 y he conseguido mantenerlo hasta el final de la carrera, sólo Alex Lowes me había aguantado un poco pero se ha descolgado en las últimas vueltas. Había alcanzado a Locatelli y a Bulega antes de que ‘Loka’ se cayera y en ese momento me dije que estaba bien, que era un podio que no había que tirar».
Comparación de su rendimiento y el de su compañero. «No es fácil, pero nuestra ventaja es que Xavi [Vierge] y yo tenemos dos estilos muy diferentes y eso es importante en el desarrollo de la moto. Durante estos meses siempre tuvimos un ‘feedback’ similar aunque nuestro estilo fuera diferente y eso fue útil para el equipo. Los dos empujamos siempre fuerte y después del verano por fin encontramos una base y por fin subimos al podio».
Tras el verano, la Honda parece funcionar mejor. «La moto no ha cambiado mucho desde las vacaciones de verano, sólo hemos encontrado una buena base y el método de trabajo correcto. Al principio del año me caí mucho y me lesioné varias veces, tenía un nuevo jefe técnico y tuvimos que conocernos, al final encontramos el método de trabajo correcto para preparar la base. A principios de año tuve tres grandes lesiones que me quitaron mucho tiempo de pista con mi equipo y eso tuvo un gran impacto».
«Sólo hemos encontrado una buena base y el método de trabajo correcto»
La reacción de Iker Lecuona al hacer podio. «Lloré, empecé en cuanto entré en la línea de boxes. En muchas situaciones al principio de este año sentí que no era lo suficientemente bueno para estar en SBK. Después de las lesiones, después de estos dos años en los que he sufrido mucho, ya no me sentía piloto. Pensaba: ‘Vale, estamos en la pista, vamos a dar unas vueltas y luego nos vamos a casa’. Pensaba mucho, luchaba mucho incluso a nivel mental, desde este verano empecé a trabajar con un psicólogo que me ayudó a estar más tranquilo en el box y a encontrar un método que me funcionara».
La calma tras la tormenta. «Estoy muy contento porque he sufrido mucho. Es especial porque es el primero del año, y sobre todo el primero después de dos temporadas. He tenido lesiones importantes, así que no sólo es especial para mí, sino también para todo el equipo. Quizá no sea tan especial como mi podio en Moto2, pero sin duda es mucho más especial que el podio de Indonesia».
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